Un joven de 19 años de edad, fue sorprendido por los propietarios de una vivienda ubicada en la calle seis norte con avenida 25 de la colonia centro de Cozumel, cuando trataba de robar tubos de cobre de la instalaciones de agua potable, y aunque trató de huir del lugar, fue alcanzado por integrantes de esa familia quienes lo sometieron mientras solicitaban la ayuda al 911.
Sin embargo y de acuerdo a la información que proporcionaron, realzaron varias llamadas al número de emergencia sin que fueran atendidos, por lo que decidieron amarrarlo a un poste en espera de que los agentes llegaran al lugar. Mientras tanto, los vecinos le dieron una “calentadita”, para que evite regresar a esa zona, ya que lo sentenciaron que si lo observaban cerca, correría con peor suerte.
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Pasaron varios minutos cuando el 911 atendió la llamada de un vecino, quien les comentó sobre los hechos, enviando una unidad policiaca hasta donde se encontraba amarrado el joven que clamaba no ser golpeado.
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Los elementos lo desataron y le pusieron esposas, para después subirlo a la patrulla y trasladarlos las instalaciones de Seguridad Pública, donde quedó a disposición del Juez Calificador, quien le impuso 36 horas tras las rejas. Previamente se realizó un examen médico, arrojando que no contaba con lesiones graves o que pusieran en riesgo su vida.
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MA