Un extraño paquete envuelto en cinta adhesiva y amarrada a uno de los rieles de las vías del tren cercano al poblado de Chiná, movilizó a elementos del Ejército Mexicano y la policía estatal, tras un primer reporte de una supuesta bomba, lo cual fue descartado por elementos caninos, para posteriormente ser retirado y enviado al Fiscalía General del Estado.
Los hechos fueron descubiertos por ciudadanos alrededor de las 20:00 horas, quienes reportaron al número de emergencia, acudiendo al lugar elementos estatales y federales, tras la descripción del artículo amarrada con cinta adhesiva gris a las vías del tren.
Los agentes policiacos al ver la extraña forma del objeto, procedieron al acordonamiento del lugar derivado al posible peligro y solicitaron la intervención del Ministerio Público y de la Secretaría de la Defensa Nacional.
Una hora más tarde después del descubrimiento del extraño artefacto se apersonaron agentes federales especializados en explosivo pertenecientes a la 33va Zona Militar, quienes haciendo uso de perros entrenados para localización de químicos y explosivos se dispusieron a revisar el “paquete” el cual en una primera instancia no alertó a los caninos.
Pese a ello los uniformados tomaron previsión, se mantuvieron al margen, resguardando el sitio y procedieron a la recuperación del sospechoso artículo, el cual tenía una dimensión de una caja de 20 a 25 centímetros de largo y 15 de ancho, cubierto con la cinta gris.
Una vez que el personal especializado retiró el objeto, lo trasladaron para su investigación a la Fiscalía General del Estado, donde a través de un comunicado darán a conocer el contenido, ya que no se descarta que sea igualmente estupefaciente.
Finalmente el capitán segundo de infantería, Francisco Javier Pérez Martínez, del X Batallón, con sede en Campeche, tras el retiro del extraño paquete, dijo que el peligro había pasado y dejó a las instancias ministeriales los detalles.
Por Dismar Herrera