Sin vigilancia marítima se encuentran las costas del puerto de Seybaplaya pese a los innumerables robos que se han registrado en comunidades pesqueras.
Por causas que se desconocen, las autoridades que resguardan los litorales y costas no implementan operativos para la desarticulación de la célula criminal que opera desde Punta Xen hasta la bahía de Villamadero ante la simulación que prevalece, denunciaron pescadores ribereños, permisionarios y empresarios pesqueros que se ven afectados con la pérdida de sus artes de pesca y motores fuera de borda.
El permisionario Enrique Rosas precisó que ante esta situación de inseguridad que se vive en el sector ribereño, “hasta el momento no logramos comprender por qué la Secretaría de Seguridad Pública que cuenta con embarcaciones de intercepción no realiza operativos en conjunto con la Secretaria de Marina Armada de México y Guardia Nacional, ante el constante asecho de esta célula criminal que no ha dejado de operar y en muchos de los casos los pescadores han escapado y dejan sus redes que después han recuperado en otros casos se las han llevado con todo y especies marinas aseguradas”.
De su lado, el pescador Adrián Uc lamentó la simulación que prevalece por parte de las autoridades policiacas de los tres niveles de Gobierno que a sabiendas que existe esta célula criminal que opera en las costas del municipio de Champotón, “no hacen nada al respecto ni tampoco instalan mesas de trabajo para dialogar con el sector pesquero para conocer que está ocurriendo en los litorales y emprender acciones que permitan desarticular este grupo que se dedica al robo de motores", advirtió.
Demandan operativos
El empresario pesquero Ernesto González, consideró como prioridad que autoridades de la Secretaría de Marina Armada de México, de Seguridad Pública, Guardia Nacional y Fiscalía General del Estado (FGE) pongan en marcha operativos sorpresa por las noches y madrugadas en las costas que permita acabar con los robos de motores, ante la marcada inseguridad que viven ribereños.
Advirtió que los hombres de mar son interceptados por encapuchados en embarcaciones rápidas, en algunos casos los despojan de sus motores en otros han huido.
“Es una situación grave, hasta el momento no se ve interés de las autoridades policiacas por lo que hacemos el llamado a instalar meses de diálogo y si es necesario aportar combustible, el sector se organiza y apoya a las fuerzas policiales con los gastos de gasolina para que cumplan con su trabajo”, sentenció.
Por José Valencia