El Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) exhorta a toda la población a cuidarse y usar protectores solares para evitar daños severos en la piel durante esta temporada de calor.
La institución, informó que la exposición continua a los rayos solares sin protección puede ocasionar desde lesiones leves en la piel, cambios de pigmentación, arrugas y hasta cáncer.
Cabe señalar que, para la sociedad, tomar el sol es considerado como un hábito saludable; sin embargo, hacerlo en tiempos prolongados o de manera constante, principalmente en sitios de altas temperaturas como Campeche, puede provocar ciertos problemas en la piel, por lo que, través de su campaña “Verano Seguro”, el organismo pretende generar conciencia en la ciudadanía.
Debido a que el daño provocado por el sol no suele causar sintomatología, es generalmente detectado hasta que se manifiesta como una herida que no sana o una pequeña protuberancia que en un principio puede ser roja, pero luego se torna áspera o escamosa, por lo que es necesario que las personas creen una cultura de prevención contra los efectos negativos de los rayos ultravioleta.
Entre las principales afecciones que se generan, se encuentra el cáncer de piel, y afecta tanto el carcinoma basocelular y escamoso como el melanoma. Un 90 por ciento aparecen frecuentemente en las zonas de la piel expuestas al sol: la cara, el cuello, las orejas, las manos y los antebrazos.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) estima que, para no quemarse, la población no debe estar más de 30 minutos sin fotoprotección solar en verano, 120 minutos en invierno y 10 en verano para sintetizar las cantidades recomendadas de vitamina D.
Con exposición a la luz solar diaria de 10-15 minutos, es suficiente para sintetizar la dosis necesaria de vitamina D, pero, al permanecer más tiempo, se generan lesiones que terminarán en heridas de mayor consideración.
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No obstante, hay personas que por sus actividades, deben pasar horas prolongadas bajo los rayos del sol, ante ello se recomienda el uso del sombrero para proteger el rostro, gafas que absorban los rayos ultravioleta, ropa de algodón, preferentemente de colores claros y aplicarse el protector o el bloqueador solar 20 minutos antes de exponerse al sol y reponerlo cada cuatro horas, evitar la exposición solar en las horas cercanas al mediodía y en caso de hacerlo, que no sea por más de media hora.
El organismo enfatizó que es importante que a los bebés de seis meses jamás se les exponga al sol, ya que su piel es delgada y podrían sufrir quemaduras, por lo cual se recomendó que ante el mínimo indicio de mancha o lunar extraño en la piel, se acuda con su médico familiar para que lo analice y le recomiende el tratamiento adecuado a su padecimiento.
GH