El señor José Vázquez Tun, de 81 años de edad, se quedó sin techo donde dormir después de que un árbol seco se desplomara encima de su vivienda y partiera en pedazos las láminas de asbesto que lo protegían; el comisario municipal de Santa Rita Bacanchén, perteneciente al municipio de Hopelchén, Carlos Josué Herrera Pérez señaló que había anticipado la caída del tronco a personal de Protección Civil pero pusieron de pretexto que no contaban con recursos para cortarlo y ahora el octogenario se quedó sin hogar. Durante el incidente el afectado no se encontraba en su vivienda ya que sus sobrinas se lo llevaron a comer con ellas, cuando un fuerte viento azotó la región provocando que la planta de Ramón se viniera abajo.
El comisario municipal de la localidad arribó al Palacio Municipal para reportar lo que ocurrió en el domicilio del señor Vázquez Tun; dijo que con anterioridad había reportado a los trabajadores de Protección Civil que el viejo tronco podría caer por lo seco que se encontraba y no resistiría un ventarrón, sin embargo, no le hicieron caso y pusieron de pretexto que no tenían recursos para trasladarse hasta la comunidad de Santa Rita y dejaron pasar el asunto, que ayer se convirtió en un problema porque dejó a un hombre desamparado.
Antes del incidente acudieron al predio de don José varias sobrinas para llevarlo a comer a su casa debido a que el hombre vive solo y ellas se hacen cargo de su alimentación; en el transcurso del día un fuerte viento que se formó en la zona provocó que lo que quedaba de raíces se desprendan de la tierra. Las láminas de asbesto cedieron al peso del tronco seco y se partieron en pedazos para dejar la casa sin protección contra el mal tiempo o el inclemente sol, por lo que deberá pasar una temporada en casa de sus familiares hasta que se logra reponer el techo, comentó la autoridad del pueblo que anda en busca de apoyo.
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Herrera Pérez dijo que los vecinos del afectado escucharon el fuerte ruido, al salir al patio vieron lo sucedido y fueron a revisar la casa para localizar a su dueño, al no encontrarlo avisaron a sus familiares y fue ahí donde lo encontraron a salvo. José Vázquez padece de la visión y todos los días recibe asistencia de sus sobrinas.
Ahora –continuó– el señor de 81 años tendrá que quedarse en casa de sus sobrinas pues la casa terminó llena de basura, aunado a que habrá que cortar los troncos con motosierra y después volver a armar otro techo, pues el octogenario vive solo y es necesario que reciba ayuda de las autoridades ya que con anterioridad se le reportó a Protección Civil pero nadie quiso atender el aviso y aquí están las consecuencias.
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CC