“El consumo de sustancias y los problemas de salud mental están asociados y probablemente el resto de este siglo, lejos de disminuir esa correlación, va a incrementar”, señaló el secretario técnico del Consejo Estatal de Salud Mental y Adicciones, José Luis Reyes Farfán, quien también expuso que un factor de la conducta suicida es la incapacidad para resolver problemas y manejar la frustración.
En Campeche, del 1 de enero al 22 de octubre de 2023 se han registrado 96 suicidios, 80 de ellos en hombres y 16 mujeres, de este total, ocho son menores de edad; además, durante el 2022 el estado se ubicó entre las cinco Entidades del país con las tasas más altas de suicidio, pues por cada 100 mil habitantes ocurrieron hasta 8.3, según datos del Inegi.
El funcionario estatal recordó que varios de los suicidios que se han registrado en las últimas semanas fueron por ruptura con la pareja o por una pérdida, situación que refleja que pocos saben cómo manejar el malestar y la frustración que genera una pérdida, “es decir, casi nadie está listo para saber qué hacer con lo que siente”.
“A nivel mundial se ha visto que la mayor parte de las personas que intentaban quitarse la vida estaban deprimidas, pero no todas las personas con depresión intentan matarse, ¿Qué nos quiere decir esto? Que existe un gran déficit en la población mexicana, nadie nos enseña a regular nuestras emociones”, explicó.
“Una de las cosas que se ha encontrado es que en la conducta suicida, el área para procesar todos los estímulos positivos del mundo está muy apagado, entonces, tenemos que ayudarles, pero no siempre funciona”, comentó, para luego añadir que ahora existen fármacos de respuesta ultrarrápida, sin embargo, no se encuentran dentro del sector público, sino en el privado.
Se trata de la esketamina, un medicamento aprobado por la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA), y que se administra en casos de depresión resistente a tratamiento y conducta suicida.
“Es inhalado y quita la ideación suicida desde las primeras horas, pero es un medicamento muy caro, que no se ha podido lograr incluir en el sistema de salud pública, pero no se descarta que este tipo de medicamentos puedan, en un futuro, ser una alternativa para la población campechana”, consideró.
El principio activo de Spravato, la esketamina, es un antidepresivo que actúa sobre los receptores (dianas) del cerebro para una sustancia llamada NMDA. La NMDA regula la transmisión de las señales entre las células de las zonas cerebrales que participan en la regulación del estado de ánimo.
En ese mismo tenor, agregó que este medicamento resarciría en gran parte el que las personas con algún tipo de malestar emocional consuma alguna sustancia dañina para la salud en busca de reducir su dolencia.
“Y esto es importante de mencionar porque muchos de ellos empezaron a consumir sustancias para automedicarse. Estamos hablando que si un niño con déficit de atención llega a los 15 años y de repente le ofrecen cocaína, al ser un estimulante, enciende áreas de su cerebro que lo hacen sentirse mejor, esto genera que ese niño, por la vulnerabilidad que tenía con ese trasfondo de déficit de atención se enganche con la sustancia, lo mismo el ansioso que fuma o que bebe para calmar su angustia, entonces vamos a seguir viendo una comorbilidad y una presentación dual siempre”, señaló.
Agregó que la ideación suicida, de forma general mundial es mayor en las mujeres, pero llega un punto a cierta edad en la que el género ya no marca una gran diferencia, y que en este momento, por las grandes problemáticas geopolíticas, sociales y económicas que se viven, tanto el hombre como la mujer, de alguna manera, en su propia trinchera la pasan mal, y eso viene a romper paradigmas bajo los cuales se manifestaba y se construían las políticas públicas, ya que en este momento se dirigen hacia toda la población.
No obstante, añadió que la conducta suicida afecta mucho más a jóvenes de nivel secundaria y a personas de entre 40 y 45 años, e indicó que más que un proceso depresivo afectivo, se ha encontrado mucha incapacidad para resolver problemas para manejar la frustración, la ira y para buscar alternativas respecto al problema que se tiene en ese momento.
Detectados
Asimismo, ante problemas de salud mental que se ha detectado entre la población estudiantil, el Colegio de Estudios Científicos y Tecnológicos de Campeche (Cecytec), inició una serie de reuniones con padres de jóvenes que estudian en los siete planteles localizados en el Estado, aseguró la directora general, Margarita Duarte Quijano.
Declaró que cuando el psicólogo escolar les informa de un caso preocupante, se acude a casa de los padres de familia para hablar con ellos y recomendarles establecer mayor comunicación, así como atención hacia el menor: “la educación es tripartita, padres de familia, escuelas y alumnos, tenemos que estar muy unidos los tres”, señaló.
Expuso que la etapa más difícil del desarrollo se encuentra entre los 15 y 18 años, donde los jóvenes sienten que nadie los ama, aunado a la falta de expresiones de cariño por parte de sus padres, así como al distanciamiento social que han registrado como producto del excesivo uso de los aparatos electrónicos y las redes sociales, donde además son tentados a peligrosos retos.
Aseguró que hasta el momento no se ha registrado algún caso de suicidio entre los alumnos del Cecytec, y es precisamente lo que se busca evitar mediante pláticas de sensibilización con los padres de familia sobre estos temas.
Duarte Quijano reconoció que los docentes han detectado problemas de salud mental en los estudiantes, principalmente depresión, la cual atribuyó a la falta de amor y atención, debido a la dinámica laboral de los padres de familia.
“Los maestros tienen la obligación de observar al alumno que se retrae, al alumno que no quiere participar, esas son las primeras señales que debemos atender como maestros y como padres de familia, así como estar pendientes de llamados de atención como son los cambios bruscos y frecuentes de humor”, expuso.
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GC