Campeche

La tercera etapa del corte de la calabaza de la variedad de chigua en la comunidad de Iturbide ha bajado hasta un 60 por ciento su precio.

Al concluir prácticamente la tercera etapa del corte de la calabaza de la variedad de chigua en la comunidad de Iturbide, el precio de comercialización de esa “pepita” está por los suelos y disminuyó casi en un 60 por ciento en menos de un mes, cuando logró venderse hasta en 70 pesos.

Lo anterior lo señaló Lizandro Pech Acosta líder productor de maíz y otros granos de esa comunidad, quién dijo que ahí fueron sembrados alrededor de 500 hectáreas de chigua tanto por ejidatarios como por comuneros.

Mencionó que ya se tiene cosechado alrededor del 70 por ciento del total de las hectáreas sembradas de chigua, e indicó que, hasta este sábado, se tiene un estimado de que en unas 375 hectáreas de chigua ya se hizo el corte de la calabaza para extraer la pepita para iniciar su proceso de secado.

Agregó que la primera siembra fue de alrededor de 400 hectáreas y la segunda unas 100 más, y en total se habrían sembrado unas 500, y el costo de siembra por cada hectárea fue de alrededor de 5,000 pesos.

Así mismo, expresó que lo que está preocupando a los productores es que el precio de compra-venta del producto disminuyó hasta en un 60 por ciento, pues en la primera semana del mes de septiembre, el precio de comercialización de 70 pesos.

Dijo que el precio en ese momento, fue porque aun había poca chigua porque no se había empezado a cosechar ni a cortar la calabaza, y por sus escases habría llegado a ese precio, sin embargo, dijo que conforme avanzaron los días el precio se desplomó.

En la última semana del mes de septiembre, ya se había cosechado poco más del 60 por ciento del total de esa superficie sembrada, y la producción aumentaba, y aunque se extraía en promedio entre 600 y 700 kilos por hectárea, y había más producto, y eso habría provocado que su precio descendiera, externó.

Pech Acosta mencionó que, hasta hace dos días, el precio de la chigua tenía un costo de 38 pesos el kilo, es decir bajó 32 pesos, lo cual afecta al productor porque al momento de vender está perdiendo mucho.

Los que lograron vender a 70 pesos “les fue bien”, pero, los que cortaron su calabaza a partir del 10 de septiembre y durante las dos semanas siguientes, resultaron afectados en cuanto al precio, pues dejaron de obtener más de 50 por ciento.

Mencionó que los principales compradores de la chigua son los menonitas de Nuevo Progreso y El Temporal, y ellos según, pagarían un poco más después de la segunda semana de octubre, pero, mientras eso sucede, el producto pierde peso.

El líder productor también mencionó que los coyotes están llegando a Iturbide y lo más que ofrecen por kilo son 28 pesos, y en algunos casos, están comprando la pepita en 28 pesos, lo cual dijo es injusto.

Sin asegurar que así suceda, mencionó que posiblemente los coyotes se ponen de acuerdo para llegar a la región y ponen un precio parejo, para así comprar el producto a bajo precio, y “majar” al productor que pasa todo un proceso en el campo para producir la chigua.