En vez de realizar rituales de fin de año, la Iglesia católica pide orar para que el 2025 sea un año de cambios y alcanzar las metas deseadas, así lo señaló el presbítero José Francisco Verdejo Aguilera titular del Decanato Carmen, quien exhortó a una reflexión personal y social para que el 2025 sea un año de cambios positivos y los errores del 2024 queden atrás.
Ante los llamados rituales que ahora con el internet se vuelven más populares para despedir el año y atraer fortuna y amor, el también rector del Santuario Diocesano de Nuestra Señora del Carmen, dijo que, lejos de lo que la gente cree, que solamente así se obtienen frutos, recordó que, a Jesucristo el pueblo de Israel lo esperaba como un libertador, como un mesías agresivo que iba a rescatarlos con violencia, pero su única arma fue el mandamiento del amor, que es capaz de transformarlo todo.
Pidió reflexión y orar para que el 2025 sea de cambios, y ante las frustraciones que muchas personas experimentan al término de un año, por no cumplir las metas u objetivos planteados, convocó a la población a mantener la fe y esperanza, dejando atrás lo que ya fue: “estamos a punto de darle vuelta a la página del libro de nuestra vida 2024 y Dios nos dará una nueva página, cada uno de los días del 2025, que se irán escribiendo conforme nosotros tengamos a Dios presente, en nuestras vidas, en la mente y corazón, para que guie nuestros pasos en un nuevo año como Dios manda” finalizó.
Repuntan ventas
Mientras tanto, las tiendas esotéricas en Ciudad del Carmen experimentan la mejor temporada del año los productos para conseguir empleo y contar con abundancia económica son los más solicitados.
Roxana Navarro Cordero, comerciante de productos estéricos comentó que con 200 pesos la población creyente puede adquirir un kit de prosperidad para realizar a medianoche de este 31 de diciembre.
En estos últimos días, lo que más ha vendido son los amuletos para el dinero, borreguitos para la suerte, las siete semillas de la abundancia, el polvo y espiga dorada, salvia, palo santo, menta, lavanda, veladoras del cuerno de la abundancia, de la prosperidad, las cuales ya están intencionadas, así como los billetes dorados y sobres rojos que son los que más se venden.
Situación similar se registra en Champotón, donde la demanda de productos para los rituales orientados a atraer salud, dinero, amor y prosperidad están registrando un notable aumento en el mercado principal de la cabecera. Fátima Che, comerciante de productos esotéricos en el principal centro de abasto, estima que las ventas han incrementado hasta un 20% en comparación con años anteriores.
“Para el amor tenemos la vela roja; para la salud, la vela azul; y para atraer dinero, la vela dorada, que se venden a 12 pesos cada una,” explicó desde su punto de venta.
Dividen opiniones
Estrenar ropa interior de colores en Año Nuevo no garantiza éxito en el amor, la salud o el dinero; es simplemente un ritual que forma parte de las supersticiones populares expresaron algunos pobladores en Hopelchén, aunque otros dijeron que “por si las dudas” sí estrenarán lencería roja o amarilla.
En un sondeo realizado, Elayne Medina, Verónica Cauich May, Mildred Sánchez Uc y Yolanda Pech, mencionaron que cada quien construye su destino; y si le va bien o mal, no será por haber estrenado ropa interior roja o amarilla.
La creencia de que usar ropa interior roja atrae amor o que el color amarillo asegura una mejora económica es infundada, señalaron. “Es como pasar debajo de una escalera y creer que tendrás mala suerte. Suele suceder, pero no por la escalera,” explicó Pech.
Por otra parte, Lenny Sonda, Karla Pech y Magali Martínez admitieron que planean estrenar ropa interior roja como parte de la tradición y con la esperanza de que les siga yendo bien en el amor, aunque reconocieron que esto no asegura resultados