En el último día de actividades del 18 Festival Internacional de Cine de Morelia, se anunciaron a los ganadores de las diferentes categorías, resultando la cinta Sin señas particulares como la gran triunfadora al obtener los galardones de Mejor Película, Actriz y Del Público.
La película que fue rodada mayormente en Guanajuato, muestra a una madre (Mercedes Hernández) buscando a su hijo desaparecido y a un joven deportado que regresa a su pueblo.
Dirigida por Fernanda Valadez, explicó que estaban a la expectativa de cómo iba a ser recibida por el público, pues son temas sensibles. Agregó que su estreno comercial está considerado para fines del verano próximo.
En las categorías de Dirección y Actor, el FICM premió a Nicolás Pereda por Fauna y al holandés Martijn Kuiper por el drama Ricochet. Dentro de los documentales, Tu’un savi ganó el premio principal, mientras que Las flores de la noche, se llevó el del público.
En la sección de cortometrajes ganaron Pinky promise (Ficción), Eco del volcán (Documental), Our perpetual now (Animación) y Coche (En Línea). La Asociación de Mujeres en Cine y la TV otorgaron a Kpaima el Premio a Cortometraje Documental realizado por una mujer.
Como presidente del festival, Alejandro Ramírez informó que registraron más de 7 mil asistentes en las salas de cine y más de 53 visualizaciones digitales, tan solo en la plataforma Klic.
Este domingo, para clausurar el FICM se proyectó la cinta El baile de los 41 de David Pablos, la cual aborda la redada que la policía efectuó en 1901 en una casa de la CDMX. Ahí se celebraba una fiesta entre personalidades de altas esferas sociales, en la que varios hombres iban vestidos con ropa de mujer, incluyendo al yerno del entonces presidente Porfirio Díaz. Este hecho resuena hasta nuestro presente, pues fue la primera ocasión que se habló de la homosexualidad en los medios de país.
Al referirse de la película de corte histórico, protagonizada por Alfonso Herrera, Mabel Cadena y Emiliano Zurita, su director David Pablos cree que “pocas cosas han cambiado. Aunque cueste creerlo, seguimos viviendo en una sociedad sumamente represora, que enjuicia y discrimina”.
Previamente, el cineasta Michel Franco develó una butaca con su nombre, instantes antes de proyectar de forma especial su película Nuevo orden, ganadora del León de Plata en la reciente edición del Festival Internacional de Cine de Venecia y que se estrenó la semana pasada.
El filme, aborda cómo luego de verse interrumpida una boda de alta sociedad, estalla una revuelta social que se transforma en golpe de Estado, todo desde la perspectiva de la novia y de las personas que trabajan para su familia adinerada.
Por La Redacción