El sábado pasado, se suscitó tremenda bronca en el Estadio Corregidora durante el encuentro de la Jornada 9 del Torneo de Clausura 2022 entre Gallos Blancos del Querétaro y Atlas, el actual campeón de la Liga MX.
Con marcador parcial 0 a 1 en favor de los Rojinegros gracias a un gol de Julio Furch durante el primer lapso, se detuvo al 63', luego que un brote de violencia sobre la grada del Estadio Corregidora se trasladó a la cancha y provocó al suspensión del duelo.
De acuerdo con la narración de una persona, el brote de violencia inició sobre la cabecera destinada para el conjunto visitante debido a que aficionados del Atlas comenzaron a pelear con familias simpatizantes del conjunto local.
Con dicho a varios testimonios, la pelea fue creciendo y la barra de animación del Querétaro le dio la vuelta a todo el estadio para enfrentarse a la del Atlas; posteriormente invadieron el terreno de juego y la situación empeoró.
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Al 61’ y con la pelota en disputa, la barra de animación del Querétaro intentó salirse de la cabecera donde se encontraban para ir en busca de los aficionados visitantes, segundos más tardes Julio Furch dio aviso de un espontáneo sobre el terreno de juego.
Dentro del terreno de juego se vieron imágenes lamentables, como un sujeto que portaba una navaja, con la que cortó la red de la portería sur del estadio, mientras que el monitor del video arbitraje, fue totalmente destruido ante la falta de seguridad en todo el estadio.
Ante la falta de medidas de seguridad, la directiva decidió abrir el paso a los aficionados que estaban atemorizados, al campo de juego y permitir desde esa zona la salida hacia la calle en algunos casos y en otros, sobre todo a los aficionados de Atlas, permaneciendo resguardados para salir en grupos sin ser agredidos.
Las autoridades de la Liga MX, en voz de su titular, Mikel Arriola, condenaron los hechos lamentables en el estadio Corregidora y aseguró que vendrán castigos ejemplares a la directiva y al club queretano.
Mientras que el presidente de los Gallos, Adolfo Ríos, fue captado ofreciendo disculpas a algunos aficionados de Atlas que permanecían en el centro del campo de juego luego de que fueron prácticamente orillados a abandonar la zona de gradas.
Finalmente, el gobernador del estado, Mauricio Kuri, condenó los hechos violentos en el recinto e informó que suspendió su viaje a Europa que ya tenía programado para atraer inversiones a la entidad, y señaló que la empresa propietaria de los Gallos deberá responder por los hechos del sábado.
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AR