La Selección Mexicana dio un golpe de autoridad al vencer 2-0 a Estados Unidos en el Estadio Akron de Guadalajara, rompiendo una racha de cinco años sin derrotar a su acérrimo rival. El encuentro, marcado por la brillante actuación de Raúl Jiménez, autor de un gol y una asistencia, representó el mejor partido del Tri bajo el mando de Javier Aguirre en su tercer ciclo como seleccionador.
Jiménez abrió el marcador al minuto 22 con un espectacular tiro libre que se clavó en el ángulo superior, demostrando su recuperado nivel y confianza. El delantero del Fulham completó su destacada actuación al minuto 49, asistiendo a César Huerta para el 2-0 definitivo, tras una jugada de gran esfuerzo y visión.
El partido también sirvió como escenario para la emotiva despedida de Andrés Guardado, quien jugó sus últimos 18 minutos con la selección, cerrando una carrera de casi 20 años que incluyó cinco mundiales y tres Copas de Oro. La ovación del público al "Principito" fue uno de los momentos más emotivos de la noche.
A pesar de la victoria y el buen juego mostrado, el encuentro no estuvo exento de polémica. Al minuto 12 se registró el primer episodio del grito homofóbico, un problema recurrente que ha costado sanciones a la Federación Mexicana de Fútbol en el pasado. Afortunadamente, no se repitió durante el resto del partido, permitiendo que el fútbol y la victoria del Tri fueran los protagonistas de la noche.