Un violento episodio empañó el Clásico Tapatío de Play-In entre Chivas y Atlas cuando un aficionado atlista, Gerardo Soria, sufrió múltiples heridas con arma blanca dentro del Estadio Akron, incluyendo una perforación en el pulmón derecho. El incidente, que ocurrió mientras el seguidor defendía a su hijo, ha puesto en evidencia tanto la persistencia de la violencia en el futbol mexicano como las deficiencias en los protocolos de seguridad y atención médica.
A través de su cuenta de Instagram (giardo08), Soria documentó la gravedad de sus heridas y denunció la precaria atención médica recibida en el estadio. "Me moví por mis propios medios, creo que algo andan haciendo mal", relató el aficionado, quien reveló que el servicio médico del estadio solo pudo proporcionarle gasas, sin capacidad para suturar las heridas ni ambulancia disponible para su traslado a un hospital.
El incidente ha generado preocupación por la seguridad en los estadios mexicanos, especialmente considerando que las agresiones ocurrieron dentro de las instalaciones del Akron. La Liga MX, hasta el momento, no se ha pronunciado sobre estos hechos, que incluyeron además trifulcas en las gradas al término del encuentro.
Esta situación ha llevado a Soria a considerar su retiro definitivo de los estadios del fútbol mexicano, reflejando una preocupante realidad sobre la seguridad de los aficionados y la capacidad de respuesta ante emergencias médicas en los recintos deportivos.
AG
