TIZIMÍN, Yucatán, 20 de junio.- “Somos muchos los cantineros que ya estamos endeudados por el sostenimiento de nuestras familias y los gastos que generan las cantinas aún cerradas, por lo que urge reactivar nuestra actividad laboral”.
Esto fue lo que externó el líder de los cantineros, Luis Darío Bates Novelo, dirigiéndose a las autoridades de todos los niveles gubernamentales, explicando que la reapertura de su negocio como el de todos los cantineros es esencial para la sobrevivencia de sus colaboradores, de sus familias y de decenas de familias que indirectamente dependen de ellos.
Expuso que hasta la fecha ya son 92 días sin laborar y que los recursos de quienes ejercen esta actividad ya se han acabado.
Indicó que los expendios ya están laborando, respetando en mayoría la nueva normalidad, por lo que son conscientes de que sus clientes para ser atendidos, tendrían que respetar todas las reglas de sanitización, chequeo temperatura, sana distancia y grupos moderados en cantidad, entre otras medidas preventivas sanitarias, pero ya es necesario reabrir sus puertas para combatirlos.
Aunado a todo lo anterior, reiteró el intento de apoyarlos por parte de las autoridades municipales que no han quitado el dedo del renglón en torno al tema, pero desgraciadamente en el Artículo 253-A, en el Inciso 2 dice que las cantinas se incluyen en la normalización hasta en la tercera ola, por lo que temen que si continúan proliferando los contagios también su reapertura se prolongue posiblemente hasta el mes de noviembre.
Añadió que si se está dando oportunidad de venta de alcohol en los depósitos y restaurantes bajo las normas de servicio a domicilio o como acompañante de los alimentos, considera que también ellos pueden cumplir y apegarse a los protocolos pertinentes para prevenir contagios de sus clientes.
(Luis Manuel Pech Sánchez)