El Sábado Santo también conocido como Sábado de Gloria, recuerda especialmente a María tras la pérdida de su hijo, por lo que es un día de dolor y tristeza, destinado al silencio, luto, y reflexión.
¿Qué se hace un Sábado de Gloria?
Durante esta jornada, la comunidad católica vela junto al sepulcro en silencio, en diversos turnos cuidan el santísimo.
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En este día la Iglesia se abstiene estrictamente de la celebración del sacrificio de la misa. La Santa comunión solo puede darse en forma de viático.
Se realiza la Vigilia Pascual que es la conmemoración litúrgica de una fiesta notable, celebrada la noche anterior a la fiesta, se celebra la noche antes de la Pascua.
Toda la celebración de la Vigilia pascual tiene lugar por la noche, no debe comenzar antes del anochecer, sino que debe terminar antes del amanecer del domingo.
Los católicos preparan un lugar adecuado fuera de la iglesia para la Celebración del nuevo fuego, donde inician con la Celebración del fuego en donde el sacerdote bendice el fuego y enciende el cirio pascual, se entona el Pregón Pascual que es un poema escrito alrededor del año 300 que proclama que Jesús es el fuego nuevo.
También se prepara la vela pascual debe prepararse para que el simbolismo efectivo. Después sigue la procesión, por medio de la cual el pueblo entra en la iglesia, debe ser conducida solamente por la luz de la vela pascual. Así como los hijos de Israel fueron guiados en la noche por una columna de fuego, de manera similar, los cristianos siguen al Cristo resucitado.
La Vigilia pascual está organizada de modo que después del servicio de la luz y la Proclamación de Pascua, después la Iglesia reflexiona sobre las obras que realizó Dios. La tercera parte recuerda el bautismo.
Después de las lecturas del Antiguo Testamento, se canta el himno «Gloria in excelsis», se tocan las campanas, se lee una exhortación del Apóstol sobre el Bautismo como una inserción en el Misterio Pascual de Cristo.
Entonces todo el pueblo y el sacerdote entonan el «Aleluya» tres veces para indicar que Cristo ha resucitado.
RM