El 'Spiderman' francés escala el rascacielos de Hong Kong con pancartas instando a la paz

Un escalador francés conocido como "Spiderman" escaló un rascacielos de Hong Kong y colocó una pancarta instando a la paz en la ciudad sacudida por los disturbios políticos.

Alain Robert desplegó una pancarta con un apretón de manos y las banderas de Hong Kong y China el viernes por la mañana. Hong Kong ha visto meses de protestas antigubernamentales que a veces han provocado enfrentamientos violentos con la policía. El hombre de 57 años, conocido por escalar edificios altos en todo el mundo, dijo que su truco era un "llamamiento urgente por la paz". "Quizás lo que hago puede bajar la temperatura y quizás sonreír. Esa es mi esperanza de todos modos", dijo Robert en un comunicado de prensa. Como en muchas de sus escaladas anteriores, Roberts no usó cuerdas ni arneses. Robert dijo que su mensaje en el Centro Cheung Kong de 68 pisos fue "un llamamiento urgente por la paz y la consulta entre el pueblo de Hong Kong y su gobierno". Su truco se encontró con una reacción mixta en línea. El artista disidente chino con sede en Australia Badiucao preguntó en Twitter: "¿Realmente quieres estrechar la mano de carniceros y dictadores?"

https://twitter.com/badiucao/status/1162173075590283264

Robert suele hacer sus acrobacias sin previo aviso o permiso. También ha escalado edificios en Hong Kong en varias ocasiones anteriores, incluido el Centro Cheung Kong. En agosto pasado, un tribunal de la ciudad le prohibió realizar más escaladas en Hong Kong durante 365 días, pero no está claro si la prohibición ha expirado. A principios de este año, fue arrestado en Filipinas después de escalar una torre de 47 pisos en la capital, Manila. Sus hazañas anteriores incluyen escalar la torre Burj Khalifa en Dubai, el edificio más alto del mundo, así como las Torres Petronas en Kuala Lumpur, el edificio Taipei 101 en Taiwán y el edificio Heron en Londres. Las protestas de Hong Kong comenzaron en abril sobre los planes para un proyecto de ley de extradición que habría permitido que los sospechosos criminales fueran entregados a China continental. Los críticos advirtieron que el proyecto de ley podría socavar las libertades legales de la ciudad y podría usarse para silenciar a los disidentes. Desde entonces, las manifestaciones han tenido un alcance mucho más amplio, con manifestantes que ahora exigen derechos democráticos plenos para los ciudadanos de Hong Kong y una investigación independiente sobre la respuesta policial a las protestas. El Centro Cheung Kong subido por el hombre araña francés es propiedad de la persona más rica de la ciudad, el multimillonario Li Ka Shing. Li publicó el viernes una serie de anuncios en los periódicos de Hong Kong, instando a poner fin a la violencia de las últimas semanas. Llamó a la gente a "amar a China, amar a Hong Kong y amarse a sí mismo" y "cesar la ira con amor" y "detener la violencia". Coincidiendo con los anuncios, el empresario emitió un comunicado diciendo que creía que la prosperidad de Hong Kong estaba vinculada al principio de "un país, dos sistemas". La antigua colonia británica tiene diferentes derechos y un poder judicial independiente del continente. También dijo que pensaba que el gobierno había escuchado los mensajes de los manifestantes "alto y claro". BBC