Se espera que la seguridad en el Medio Oriente domine la agenda mientras Trump y Rouhani abordan la reunión anual de líderes mundiales.
El Estados Unidos y de Irán se establecen para presentar sus visiones opuestas de la seguridad en el Oriente Medio a la de las Naciones Unidas Asamblea General esta semana, con el presidente estadounidense Donald Trump espera para hacer frente a la reunión de líderes mundiales el martes, y el presidente de Irán, Hassan Rouhani una dia despues.
A medida que las tensiones continúan a fuego lento en el Medio Oriente después de un ataque a los campos petroleros de Arabia Saudita y el intercambio de retórica aguda entre Washington y Teherán, los dos líderes mantienen la esperanza de diplomacia, con Trump diciendo que es "una persona muy flexible" y Rouhani extiende una "mano de amistad y hermandad" hacia sus vecinos regionales.
El domingo, Trump volvió a dejar abierta la posibilidad de una reunión no programada con Rouhani al margen de la Asamblea General de la ONU.
"Nada está fuera de la mesa, por completo, pero no tengo intención de reunirme con Irán y eso no significa que no suceda", dijo Trump. "Soy una persona muy flexible, pero no tenemos intención. No está configurado". Cuando se le preguntó si habría conversaciones entre el Secretario de Estado de los Estados Unidos, Mike Pompeo, u otro representante estadounidense con la delegación iraní en la Asamblea General de la ONU, un funcionario estadounidense de alto rango dijo que "no había nada planeado". Pero Christiane Amanpour de CNN tuiteó el ministro de Relaciones Exteriores iraní, Javad Zarif, quien le dijo en una entrevista que Rouhani estaba dispuesto a reunirse con el líder estadounidense en Nueva York esta semana "siempre que el presidente Trump esté listo para hacer lo que sea necesario" al intercambiar alivio de sanciones por "monitoreo permanente de" Instalaciones nucleares iraníes ". "La rama de olivo siempre ha estado sobre la mesa, pero la estamos mostrando nuevamente", agregó Zarif, según el tweet de Amanpour. En un discurso televisado el domingo anterior al aniversario del inicio de la guerra Irán-Iraq en 1980, Rouhani dijo que Irán estaba extendiendo una "mano de amistad y hermandad" a los países vecinos para asegurar el Golfo y el Estrecho de Ormuz, un portal vital para la industria petrolera mundial. Pero el presidente iraní también advirtió a las fuerzas extranjeras que "se mantengan alejadas" de la región. "Las fuerzas extranjeras pueden causar problemas e inseguridad para nuestra gente y para nuestra región", dijo Rouhani.
'Riesgos de error de cálculo'
Mientras tanto, en una entrevista con la emisora ??estadounidense ABC el domingo, Pompeo, el principal diplomático de Estados Unidos, dijo que Washington quiere dar a la diplomacia "todas las oportunidades para tener éxito". Pompeo dejó de lado las amenazas de represalias militares de Estados Unidos contra Irán, diciendo que la administración de Trump estaba "tomando esto en serio y estamos trabajando diligentemente para ver que esto tenga un resultado diplomático". "Pero no se equivoquen al respecto, si no tenemos éxito en eso e Irán continúa atacando de esta manera, estoy seguro de que el presidente Trump tomará las decisiones necesarias para lograr nuestros objetivos". Estados Unidos acusó a Teherán de llevar a cabo los ataques aéreos que incendiaron la planta Abqaiq de Arabia Saudita y el campo petrolero Khurais el 14 de septiembre, destruyendo la mitad de la producción petrolera del reino. Pompeo lo calificó como "uno de los mayores ataques contra el suministro mundial de energía en la historia". Pero a pesar de las advertencias iniciales de Trump de que las fuerzas estadounidenses fueron "bloqueadas y cargadas", el presidente estadounidense suavizó rápidamente su retórica, ignorando a los halcones republicanos que advirtieron que la ausencia de una respuesta contundente se interpretaría como debilidad en Teherán. Hasta ahora, Trump ha ordenado intensificar las sanciones contra Irán, y un despliegue relativamente modesto de tropas estadounidenses en el Golfo se centró principalmente en misiones defensivas como la defensa aérea y de misiles. En Fox News, Pompeo dijo que la administración estaba "profundamente consciente de los riesgos" de un error de cálculo dada la situación en la región. "Es por eso que queremos resolver esto de una manera que no recurra a la acción cinética si es posible lograr eso", dijo.
'Suicidio político'
Es probable que la amenaza de una guerra abierta haga que todas las partes sean cautelosas. "Dudo que alguien tenga el apetito de un enfrentamiento directo entre Estados Unidos e Irán", dijo Barbara A Leaf, quien fue embajadora de Estados Unidos en los Emiratos Árabes Unidos desde 2014-2018 y ahora es miembro del Instituto de Política del Cercano Oriente de Washington. "Realmente requiere restablecer la disuasión. Claramente, ahora no hay ninguno". Mientras tanto, Mohammad Eslami, ex editor en jefe de la revista diplomática iraní Khorasan, dijo que duda que Trump y Rouhani se reúnan en Nueva York. "El presidente Trump no es confiable en la forma en que Rouhani piensa en la diplomacia", dijo Eslami a Al Jazeera, y agregó que el presidente de Estados Unidos solo está interesado en mostrar que está haciendo algo en Irán antes de las elecciones de 2020. Eslami también dijo que reunirse con Trump sería "un suicidio político para cualquier funcionario iraní". "El factor cultural y la historia de las relaciones Irán-Estados Unidos son los contextos principales cuando escribimos sobre diplomacia. Trump no respeta la herencia iraní y la cultura iraní", dijo. FUENTE: AL JAZEERA Y AGENCIAS DE NOTICIAS.