Las escuelas de samba de Rio de Janeiro iniciaron este lunes su segunda noche de esplendorosos desfiles, que en esta edición reforzaron sus mensajes de crítica social y política tras un año de gobierno del ultraderechista Jair Bolsonaro.
Tras una primera jornada dedicada a criticar el racismo, la homofobia y la intolerancia religiosa, la escuela Sao Clemente abrió la noche del lunes con un despliegue de sátira política.
“Sao Clemente habla de los problemas de corrupción en el país. Estamos representando a los políticos que usan testaferros para zafarse”, dijo a la AFP la percusionista Jaqueline Simoes adornada de la cabeza a los pies con naranjas, una palabra que en portugués se utiliza informalmente como sinónimo de testaferro.
Tras ganar la presidencia con un discurso de tolerancia cero con la corrupción, Bolsonaro enfrentó en el primer año denuncias de irregularidades en el seno de su expartido (PSL) y también en relación a su hijo Flavio Bolsonaro, investigado por sospechas de lavado.
Sao Clemente también trató con humor otro tema de mucha actualidad en la política, al representar en uno de sus carros alegóricos una fábrica de “noticias falsas”.
“El carnaval trae alegría para todos. Sufrimos, trabajamos tanto [el resto del año], que en este momento la alegría es más fuerte. Pero aun así, dejamos un recado para concientizar a todos y tener un Brasil mejor”, dijo Marcelo de Castro, bailarín desde hace más de 30 años en esa la escuela.
La escuela de samba Sao Clemente, con sus 3,200 bailarines y músicos disfrazados y sus seis enormes carrozas alegóricas, hizo un repaso en el Sambódromo de esta ciudad brasileña del ingenio de los pícaros más famosos del país para engañar a la población y enriquecerse a costa ajena.
Esta agrupación cultural con sede en la favela Doña Marta, que siempre se ha caracterizado por sus presentaciones satíricas, fue la primera en presentarse entre las seis escuelas que desfilan entre la noche del lunes y la madrugada del martes por el Sambódromo.
El desfile de las escuelas de samba del Grupo Especial, una especie de primera división entre esta agrupaciones artísticas, cada una con miles de componentes y músicos debidamente disfrazados y bailando al ritmo de un samba especialmente compuesto para la ocasión, es la principal atracción del carnaval de Río y el considerado mayor espectáculo del mundo al aire libre.
Desde la decisión del rey Joao de trasladar la corte de Portugal a Brasil para engañar a un Napoleón invasor hasta los ingeniosos trucos para introducir virus en los computadores ajenos o difundir falsas noticias (fack news) en las redes sociales con propósitos políticos... nada quedó fuera del alcance de la mordaz crítica de esta ópera carnavalesca.
“Don Juan (de Portugal) engañó a Napoleón (al trasladar la corona a Brasil) y convirtió la colonia de malandros en capital y el engaño en un patrimonio nacional”, reza uno de los refranes del samba “El cuento del embaucador”, que Sao Clemente escenificó en los 700 metros de la avenida Marqués de Sapucaí.
La propia escuela explicó en su presentación que “ante un escenario brasileño polarizado, sumergido en diversas crisis de orden institucional, política, económica, social y racial, el desfile expone una crónica de los desaciertos en nuestro país”.
Según los carnavalescos (director artístico) de Sao Clemente, pese a ser una crítica directa al gusto de los brasileños por “darse bien” a costa de los otros y mediante el llamado “jeitinho (truco) brasileño”, el desfile muestra que también existe esperanza de un futuro mejor para Brasil.
“En esta tierra fértil de engaños se aprende temprano que cualquier parloteo tiene fruto”, asegura el samba compuesto por Marcelo Adnet, uno de los humoristas más conocidos del país por sus diferentes programas de televisión.
Los diferentes grupos de bailarines que desfilaron fueron mostrando trucos que se hicieron famosos, como el de vender casas en cementerios públicos, ofrecer billetes de lotería supuestamente premiados, prometer bebidas de hierbas milagrosas o hasta la poción que “trae al ser amado en tres días”.
Igualmente exhibe a los políticos que reciben coimas y que tienen privilegios y los falsos profetas que cobran por el perdón de los pecados o la entrada al paraíso.
En una clara referencia al expresidente Fernando Collor, un grupo interpretó el político “cazador de marajás” que promete acabar con privilegios en las elecciones y después se enriquece desde su posición privilegiada como jefe de Estado.
Otras de bailarines usaron disfraces y alegorías con referencias a testaferros, coimas y privilegios de presos ricos en las cárceles.
Cada una de las escuelas de samba tiene entre 60 y 70 minutos para atravesar los 700 metros del Sambódromo mientras los jurados califican criterios como creatividad, armonía, disfraces o composición.
Las calificaciones de los jurados son leídas el miércoles de ceniza, cuando concluye el carnaval y se conoce la nueva escuela campeona de Río de Janeiro.