Este sábado se confirmó que Rayan, el niño de 5 años que cayó hace cinco días en un pozo en Marruecos, murió, minutos después de que los equipos de rescate lograran sacarlo del agujero.
Las primeras imágenes mostraban al grupo de emergencia corriendo por un pasillo formado por guardias de seguridad desde la boca de la excavación en la que estuvieron trabajando desde el martes pasado llevando entre ellos una camilla hacia una ambulancia parada al otro extremo.
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Rescatistas esperan salvar con vida a Rayan, niño que cayó en un pozo en Marruecos
Este sábado los rescatistas entraron a la "fase decisiva", ya que estaba a unos 80 centímetros del hueco en el que está Rayan.
Los expertos indican que se trata de la parte más delicada en la que deben usar sistemas manuales para evitar derrumbes o colapsos de las paredes.
Esta última etapa para alcanzar al niño eran las más difíciles por los riesgos de desmoronamiento.
“Es difícil saber su estado, pero tenemos una gran, gran, gran esperanza”, dijo Abdelhadi Temrani, uno de los rescatistas, y señaló que el equipo estaba proporcionando oxígeno las 24 horas al niño y lo han estado monitoreando con una cámara.
Los ingenieros y topógrafos que participaron en la operación cavaron un túnel horizontal de tres metros, mientras los equipos técnicos se encargan de garantizar la seguridad del perímetro.
El rescate de Rayan generó solidaridad en las redes sociales en todo el mundo.
Este accidente recuerda una tragedia ocurrida en España en 2019 cuando un niño de dos años murió tras caer en un pozo abandonado de 24 centímetros de diámetro y más de 100 metros de profundidad en Andalucía. Tras una operación de gran envergadura los restos del menor fueron rescatados tras un despliegue que duró 13 días.
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RM