La Real Academia de las Ciencias Sueca otorgó el Premio Nobel de Química 2024 a tres destacados científicos cuyas contribuciones han transformado la investigación en biología molecular. David Baker, Demis Hassabis y John M. Jumper han sido galardonados por su trabajo pionero en el diseño y la predicción de estructuras proteicas, un avance que promete revolucionar campos como la medicina y la biotecnología.
El premio se divide en dos partes: una mitad corresponde a David Baker, de la Universidad de Washington, por su trabajo en el diseño computacional de proteínas, y la otra mitad se reparte entre Demis Hassabis y John Jumper, ambos de Google DeepMind, por el desarrollo de modelos de inteligencia artificial capaces de predecir la estructura de proteínas con precisión.
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David Baker y el diseño de proteínas
David Baker, quien dirige el Instituto de Diseño de Proteínas en Seattle, es reconocido por haber desarrollado Rosetta, un programa de software que permite diseñar proteínas totalmente nuevas, no presentes en la naturaleza.
Desde 2003, el equipo de Baker ha creado proteínas con aplicaciones prácticas en biomedicina y tecnología, incluyendo vacunas y sensores moleculares. Su método ha abierto la puerta para diseñar proteínas personalizadas que podrían utilizarse en el tratamiento de enfermedades y en la creación de nuevos materiales.
Inteligencia artificial y predicción de estructuras
Por su parte, Demis Hassabis y John Jumper lograron avances significativos en el uso de inteligencia artificial para predecir la estructura de proteínas, uno de los mayores retos en la biología molecular. Gracias a su programa AlphaFold, desarrollado en Google DeepMind, lograron mapear todas las proteínas humanas, lo que representa un avance importante para el estudio de las funciones biológicas a nivel molecular.
Su trabajo ha reducido el tiempo de predicción de estructuras proteicas de años a minutos, lo que facilita la investigación científica en áreas como la farmacología y la genética.
Impacto en la investigación científica
El trabajo conjunto de Baker, Hassabis y Jumper permite descifrar el "código" de las proteínas, moléculas esenciales formadas por aminoácidos que cumplen funciones vitales en todos los organismos. Su investigación ha brindado nuevas herramientas para la creación de terapias avanzadas, así como para el desarrollo de tecnologías que se adapten a necesidades específicas en áreas como la nanomedicina.
El Nobel de Química se suma al de Física, anunciado ayer, y precede a los de Literatura, Paz y Economía, que se conocerán en los próximos días. Con sus descubrimientos, los laureados de este año sientan las bases para futuras aplicaciones en la investigación médica y científica, lo que podría tener un impacto duradero en el campo de la biología y la química a nivel global.
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