La actividad económica en México registró un crecimiento interanual del 0.4 por ciento en agosto, impulsada principalmente por el aumento del sector servicios, a pesar de las caídas en los sectores agropecuario e industrial, informó el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).
De acuerdo con el reporte basado en cifras originales, el Indicador Global de la Actividad Económica (IGAE) mostró que el sector terciario, que incluye los servicios, creció un 1.3% en comparación con el mismo mes del año anterior.
Sin embargo, este avance fue contrarrestado por caídas en los otros dos grandes sectores de la economía. El sector primario, que abarca la agricultura y la ganadería, retrocedió un 2.1 por ciento, mientras que el sector secundario, relacionado con la industria, sufrió una contracción del 0.9 por ciento.
Estos descensos reflejan los desafíos que enfrentan tanto el campo mexicano como la industria, que han visto afectadas sus operaciones por factores como las condiciones climáticas adversas y una menor demanda global.
A nivel mensual, la economía mexicana tuvo un ligero retroceso del 0.3 por ciento en agosto en comparación con julio, según cifras desestacionalizadas que eliminan los efectos de calendario. En este análisis mensual, el sector agropecuario mostró una caída significativa del 9.1 por ciento, mientras que la actividad industrial se redujo un 0.5 por ciento. En contraste, el sector de los servicios avanzó un modesto 0.3 por ciento, lo que ayudó a mitigar la caída general.
A pesar de estas fluctuaciones mensuales, la actividad económica de México acumuló un crecimiento del 1.9% en los primeros ocho meses de 2024 en comparación con el mismo periodo del año anterior. Este avance refleja la resistencia de ciertos sectores, en particular los servicios, que continúan siendo el motor de la economía mexicana en medio de un entorno global incierto.
Con este panorama, las autoridades económicas y los analistas deberán seguir de cerca la evolución de los sectores productivos en los próximos meses para evaluar el impacto de estos descensos y determinar las medidas necesarias para fomentar una recuperación más equilibrada.
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