Esta mañana, el presidente Andrés Manuel López Obrador enfrentó una situación tensa cuando un grupo de individuos encapuchados, presuntamente estudiantes normalistas de Ayotzinapa, realizaron una incursión violenta en el Palacio Nacional.
Mientras aún se realizaba la conferencia mañanera, el mandatario se refirió a este incidente como un claro intento de provocación, asegurando que su administración no responderá con violencia y que el subsecretario de Gobernación, Félix Arturo Medina, se encargará de atender a los manifestantes.
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“No vamos a caer en provocaciones. Buscan una respuesta violenta de nuestra parte, algo que no sucederá ya que no somos represores”, afirmó López Obrador con firmeza.
El incidente se produjo en el contexto de la conmemoración del décimo aniversario de la desaparición de los 43 estudiantes de la Escuela Normal Rural Isidro Burgos de Ayotzinapa, marcando un momento de alta tensión cuando los protestantes forzaron su entrada al recinto con petardos y una camioneta de la Comisión Federal de Electricidad (CFE).
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El presidente minimizó los daños causados al Palacio Nacional, incluyendo la puerta dañada en el altercado, señalando que estos serán reparados. Su principal preocupación es evitar cualquier enfrentamiento físico, reiterando su compromiso con la no violencia y el diálogo.
Además, López Obrador anunció que planea reunirse con los padres de los estudiantes desaparecidos en un plazo máximo de 20 días.
Sin embargo, criticó la influencia de asesores y colectivos externos, como el grupo liderado por Álvarez Icaza y la Comisión Interamericana de Derechos Humanos de la OEA, junto con otros grupos conservadores y apoyos internacionales, acusándolos de buscar perjudicar políticamente a su gobierno.
El mandatario expresó su preocupación por la manipulación que sufren los padres de los normalistas desaparecidos, señalando que muchos no reciben toda la información necesaria debido a restricciones impuestas por sus abogados.
"Quiero asegurar a los padres que estamos completamente dedicados a avanzar en la investigación", concluyó, comprometiéndose a la transparencia y al avance en la resolución del caso Ayotzinapa.
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