El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, dejó claro que no tiene intención de visitar Chalco, Estado de México, una zona que lleva tres semanas afectada por inundaciones de aguas residuales.
Durante su conferencia matutina en Palacio Nacional, López Obrador explicó que su decisión se debe a su deseo de evitar posibles provocaciones de sus adversarios políticos, a quienes calificó de "conservadores", y a la necesidad de cuidar la investidura presidencial.
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"No, no, no, porque está atendiéndose (las inundaciones en Chalco). Estoy pendiente, tenemos 70 personas en refugios, están regresando a sus casas", comentó el mandatario. Añadió que su ausencia física en la zona busca prevenir cualquier uso político de su visita por parte de sus críticos, recordando una situación similar ocurrida en Acapulco tras un huracán, donde considera que fue objeto de ataques mediáticos orquestados.
López Obrador subrayó que, a pesar de no estar presente en Chalco, su gobierno está trabajando activamente en la zona. "Tenemos el Plan DN-III, el Plan Marina, la gente de Chalco sabe que ahí están soldados de la GN, de Protección Civil, marinos, que se les está ayudando", aseguró, reiterando que la atención a los afectados sigue en marcha.
El presidente criticó duramente a lo que denominó "voceros del conservadurismo" por utilizar desgracias como las inundaciones en Chalco para cuestionar y desacreditar a su administración. López Obrador señaló que estos ataques forman parte de lo que él llama "nado sincronizado", una campaña coordinada por los medios y críticos para erosionar su imagen y la de su gobierno.
Finalmente, el mandatario destacó que protegerá la investidura presidencial hasta el final de su mandato, después de lo cual se retirará a la vida privada como "Andrés Manuel de Tepetitán", refiriéndose a su lugar de origen en Tabasco.
IO
