La presidenta de México, Claudia Sheinbaum Pardo, respondió con firmeza pero sin confrontación directa a las recientes declaraciones del presidente de El Salvador, Nayib Bukele, quien cuestionó públicamente la capacidad del gobierno mexicano para atender la inseguridad, sugiriendo que se puede controlar estado por estado, tal como él asegura haberlo hecho en su país.
Durante su conferencia de prensa matutina, Sheinbaum defendió la soberanía mexicana y subrayó la importancia de mantener el respeto mutuo entre naciones.
“Él fue electo por su pueblo, pero al mismo tiempo pedimos respeto para México. Es la característica de la diplomacia”, enfatizó.
Bukele, a través de su cuenta en la red social X (antes Twitter), comparó las dimensiones poblacionales de México y El Salvador, insinuando que si su país ha logrado controlar la violencia con menos recursos y población, México también debería ser capaz de hacerlo.
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“Resuelvan el tema de seguridad en un estado primero, luego en el siguiente, y así sucesivamente…”, recomendó.
Aunque Bukele presume una drástica reducción de homicidios desde que asumió el poder en 2019, su modelo de “mano dura” contra las pandillas ha sido duramente criticado por organizaciones internacionales de derechos humanos, quienes acusan al régimen salvadoreño de violaciones sistemáticas a los derechos fundamentales.
Sheinbaum evitó polemizar sobre el enfoque del mandatario centroamericano y zanjó el tema sin escalar el conflicto diplomático. “No voy a entrar en debate con Bukele. Podríamos hacer un análisis completo de su estrategia, pero no es el momento”, concluyó.
Con esta postura, la mandataria mexicana reiteró su compromiso con una estrategia de seguridad basada en el respeto a los derechos humanos, la justicia y el fortalecimiento institucional, alejada de modelos autoritarios.
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