Pobladores de diversas comunidades de la Costa Grande de Guerrero mantuvieron bloqueada durante 36 horas la carretera Acapulco-Zihuatanejo, exigiendo la detención de miembros del crimen organizado que operan en la región. La protesta, que inició el lunes, fue encabezada por comisarios de más de 40 localidades pertenecientes a los municipios de Tecpan, Petatlán y Coyuca de Catalán.
El detonante de la manifestación fue el asesinato, el sábado 10 de agosto, del hermano del comisario municipal de La Palma, en Petatlán, a manos de integrantes de La Familia Michoacana.
En el ataque también resultaron heridos de bala un primo del comisario y otras dos personas. Además, el lunes, hombres armados que circulaban en un vehículo por el centro de Zihuatanejo asesinaron a balazos a dos jóvenes e hirieron a un hombre de 40 años.
En esta zona de la Costa Grande, que colinda con la región de Tierra Caliente, operan varios grupos delictivos. Además de La Familia Michoacana, se reporta la presencia de organizaciones criminales como la de los hermanos Granados, Los Rodríguez y Fuerza Guerrerense, liderada por Oliver Coria, alias “El Ruso”.
El bloqueo de la carretera concluyó tras una reunión entre los líderes comunitarios, el Fiscal General del Estado, Zipacná Jesús Torres, y el Secretario de Seguridad Pública, Josué Barrón.
Como resultado de la negociación, se acordó reforzar los patrullajes y la seguridad en las comunidades de La Palma y Las Mesas, en el municipio de Petatlán, así como en El Durazno, ubicado en Coyuca de Catalán.
Los pobladores esperan que con estas medidas se logre reducir la violencia y la influencia del crimen organizado en la región, que ha sido escenario de múltiples conflictos y enfrentamientos en los últimos años.
IO
