En la edificación de las estaciones e incluso en los paraderos, el sector de la construcción tiene un potencial para participar además de los trabajos en donde se puedan incorporar en los 235 kilómetros de Escárcega a Calkiní del Tren Maya, resaltó el Presidente de la Cámara Mexicana de la Industria de la Construcción (CMIC), delegación Campeche, Edgar Curmina Rodríguez.
Ante la proximidad de los trabajos de obra, que se estima inicien en octubre, cuando concluyan los estudios para la elaboración del proyecto ejecutivo y la factibilidad de que el empresariado local pueda edificar las estaciones, afirmó que por supuesto las constructoras locales están en la disposición de incorporarse a este proyecto.
Añadió que se tiene contacto con los responsables federales del proyecto, bajo la coordinación del Fondo Nacional de Fomento al Turismo (Fonatur)–siendo el Enlace Territorial, Elia Salavarría Pedrero-, así como el coordinador estatal, Ramón Arredondo Anguiano. E incluso con las autoridades municipales por donde pasa el trazo del ferrocarril como son Escárcega, Champotón, Campeche, Tenabo, Hecelchakán y Calkiní.
Planteó que están “en espera de que poder tener participación en esta obra que es una gran oportunidad” sobre todo en el caso de las obras civiles a edificar como son las estaciones del Tren Maya.
Ante el interés en la obra, el Presidente Nacional de la CMIC sostiene una reunión permanente con el Director de Fonatur, Rogelio Jiménez Pons, con lo que se le da seguimiento al proyecto, mientras que en Campeche también se tiene un contacto permanente con los responsables federales.
Resaltó la inversión proyectada es de 100 mil millones de pesos (de acuerdo con las estimaciones serían 160 mil millones de pesos el costo de la inversión en todo el trayecto que son aproximadamente 1,500 kilómetros) lo que reactivaría la actividad constructiva.
Por lo que calificó positivo que se cumpla el objetivo de “reactivar la economía, detonar, independientemente que el Tren Maya es una obra es un sistema de infraestructura de comunicaciones, turismo y servicios de transporte”, ya que la propia obra va a generar una derrama económica, “es una inversión de más de cien mil millones de pesos”, apuntó. Y aunque reconoció que “obviamente no todo será construcción”, sin embargo esperen que se beneficie a la industria.
Añadió que al menos 35 empresas afiliadas a la CMIC, ya levantaron la mano y externaron su interés por participar en la construcción de las estaciones además de otros afiliados que también han expuesto que pueden colaborar en proveeduría o en acciones correspondientes a la obra en sí.
Por lo que se hizo un directorio de lo que puede ofrecer la CMIC en todo el trazo de la vía del Tren Maya que le corresponde edificar a la compañía constructora que se adjudicó el II tramo.
De los datos del INEGI que refieren descenso en la actividad económica aclaró que es hacia la industria petroquímica ligada a la actividad petrolera y a la economía no a la de la construcción.
Explicó que el sector de las obras civiles o industria de la construcción como se conoce en la mayoría de los casos son microempresas y si registró un leve crecimiento. Y aunque no tiene un incremento notable consideró que con el Tren Maya se podrá observar un alza en la economía local.
En Campeche las estaciones que se construirán son las de Escárcega y Campeche, además la de Xpujil, cuando se licite dicho tramo, que se encuentra en controversia por el amparo promovido por el Consejo Regional Popular e Indígena de Xpujil (CRIPX) por la construcción de las vías del ferrocarril y por el Manifiesto de Impacto Ambiental que se presentó.
El Coordinador del Tren Maya por el Estado de Campeche, Ramón Arredondo Anguiano informó que además de las estaciones de Campeche y Escárcega (así como Xpujil) también se contempla edificar paraderos de Bienestar en Candelaria, Carrillo Puerto, Tenabo, Hecelchakán y Calkini.
De los paraderos explicó que serían “pequeñas estaciones, paraderos, que con cuantas localidades existan, tantos terminales van a ver. Pero nada más un cuartito para la gente. Si no hay gente esperando se sigue de largo. Y en las estaciones, si va a parar”, apuntó.
Por Wilbert Casanova Villamonte