Quintana Roo aumentó su endeudamiento per cápita, al pasar de 13 mil 88 pesos por habitante a 13 mil 133 pesos en el segundo trimestre del año; además, es la segunda entidad más endeudada del país en este rubro, de acuerdo con el reporte del Instituto Belisario Domínguez del Senado de la República.
El estudio del Senado precisó que al segundo trimestre de 2020 Quintana Roo ocupó el tercer lugar de los estados que presentaron una mayor relación de su deuda respecto de sus participaciones federales.
En este rubro el estado registró 172.3 por ciento de relación de su deuda con sus participaciones, sólo por debajo de Nuevo León, que tuvo 182.1 por ciento y Chihuahua, con 176.7 por ciento. La entidad decreció 3.2 puntos porcentuales en este rubro respecto al mismo período del 2019.
El estado también sobresalió en el segundo lugar con una mayor relación de su deuda respecto de su Producto Interno Bruto (PIB) con 6.5 por ciento, solo por abajo de Chihuahua, que registró 6.6 por ciento.
No obstante, de acuerdo con el reporte del Senado, la deuda del estado como porcentaje de su PIB disminuyó en 0.4 puntos porcentuales respecto al mismo trimestre del año anterior
A la baja confianza crediticia
De acuerdo con el Sistema de Alertas de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP), al segundo trimestre del 2020 Quintana Roo presentó un nivel de endeudamiento en observación, es decir, se encuentra limitado a un techo crediticio adicional de 5.0 por ciento para el resto del año.
El semáforo de alertas 2020 destaca que de las 32 entidades federativas, solo cuatro, entre ellas Quintana Roo, se encuentran en un nivel de endeudamiento en observación que las limita.
El estado presenta poco margen de maniobra al registrar una sostenibilidad de la deuda bajo observación, con capacidad de pago limitada en semáforo rojo, aunque tiene disponibilidad financiera para obligaciones a corto plazo.
De acuerdo con las calificaciones crediticias de Ficht Ratings al 24 de junio del 2020, Quintana Roo obtuvo una BBB, más débil, con perspectiva crediticia estable que le resta nivel de confianza.
Obligaciones financieras
Al segundo trimestre del año, el estado enfrentaba una deuda de 23 mil 403.4 millones de pesos, que divididos entre un millón 782 mil 031 habitantes resulta una endeudamiento por persona de 13 mil 133 pesos.
En este caso el reporte toma en cuenta a toda la población del estado, no únicamente a la económicamente activa, que de lo contrario podría aumentar significativamente el nivel de endeudamiento per cápita, precisa el informe.
Al segundo trimestre del 2020 la deuda del estado aumentó en uno por ciento en comparación con el trimestre anterior enero-marzo, que fue de 23 millones 179 mil pesos.
El 89.2 por ciento del total del financiamiento que se obtuvo en el primer trimestre corresponde al estado y sus entes públicos y el resto 10.8 por ciento a los municipios y sus entes públicos, señala el estudio del Senado.
El reporte precisó que Quintana Roo obtuvo su financiamiento a través de la Banca Múltiple, con 71.6 por ciento; con la Banca de Desarrollo, en un 27.9 por ciento y con otras fuentes en 0.4 por ciento.
Esta deuda tiene como fuente de pago sus participaciones federales en un 92.2 por ciento y deuda de corto plazo quirografario con 7.8 por ciento.
Adquiere deuda en plena pandemia
Aunado a este escenario, en el segundo trimestre, entre abril y mayo, contrató deuda con Banobras y otros bancos por 18 mil 736 millones de pesos, de acuerdo con la Secretaría de Finanzas y Planeación (Sefiplan).
El 13 de abril obtuvo un crédito con Banorte por seis mil 300 millones de pesos; una semana después, el 17 de abril, contrató con Banobras cinco créditos: dos por mil 500 millones de pesos cada uno; otro por cuatro mil 500 millones de pesos; uno más por tres mil millones de pesos y un quinto por 786 millones 561 mil 295 de pesos.
El 7 de mayo contrató otros dos créditos con HSBC, uno por 500 millones de pesos y otro por 650 millones de pesos.
Plan de Austeridad
Con un déficit en la recaudación de tres mil 327 millones de pesos derivado de la crisis por COVID-19 y reducción en ingresos federales por 744 millones de pesos, el gobierno del estado presentó un Plan de Austeridad para lo que resta del año.
La secretaria de Finanzas informó que se tiene programada una reducción de 20 por ciento al rubro de Servicios Personales y Prestaciones Extraordinarias y 10 por ciento en el consumo de energía eléctrica y agua en cada dependencia estatal.
También reducir 15 por ciento el monto asignado a contratos de arrendamiento de edificios, vehículos, mobiliario, equipo, tecnologías de la información y otros gastos.
Se reducirán, gastos de difusión, de orden social, cultural y otros servicios generales; gastos de papelería, consumibles, materiales para construcción, combustible y lubricantes, vestuarios, uniformes, herramientas, servicios profesionales de reparación y mantenimiento; servicios de comunicación social, de traslado y viáticos, entre otros.
Con estas medidas, señaló, se espera que se pueda alcanzar un presupuesto que sea suficiente para las metas que se tienen estipuladas en el Plan Estatal de Desarrollo y evitar a toda costa reducir la plantilla laboral.
Por Lino Sarmiento