Por Astrid Sánchez
A partir de este lunes 23 de marzo y hasta el 19 de abril el gobierno de México comenzará con la implementación de la Jornada Nacional de Sana Distancia, una serie de medidas de distanciamiento social para evitar la propagación del coronavirus COVID-19.
A través de sus canales de comunicación, la Secretaría de Salud informa que esta jornada promueve las medidas básicas de prevención, la suspensión temporal de actividades no esenciales, la reprogramación de eventos de concentración masiva e incrementar la protección y los cuidados de los adultos mayores.
Hasta este sábado en México fueron registrados 251 casos positivos, 697 sospechosos y dos muertes a causa del COVID-19 y aunque autoridades aseguraron que el país se encuentra en fase uno de la pandemia, las medidas de prevención comenzarán a ser más restrictivas.
La Jornada Nacional de Sana Distancia, además de enfatizar en el lavado constante de manos, el estornudo de etiqueta y saludo a distancia, promueve la cancelación de eventos no esenciales, es decir, que no afecten la actividad de las organizaciones públicas, sociales o privadas.
La recomendación de la Secretaría de Salud para este periodo y que ya ha comenzado a aplicarse es la postergación de eventos que congreguen a más de 5 mil personas.
Para la protección de la ciudadanía, en especiales de las personas de la tercera edad, la recomendación es mantener al menos un metro y medio de distancia con otras personas y evitar al máximo permanecer cerca de una persona con alguna enfermedad respiratoria.
Tanto la Secretaría de Salud como la Organización Mundial de la Salud (OMS) han difundido las medidas de prevención para contener la enfermedad.
Cabe destacar que las únicas formas de contagio son por contacto personal cercano con una persona cuyo caso ha sido confirmado; a través de personas infectadas que tosen o estornudan a muy corta distancia y al tocar objetos o superficies contaminadas y luego tocarse la boca, la nariz o los ojos, por ello la insistencia en el lavado constante de manos y la distancia de metro y medio.
Jesús Torres Flores, especialista en virología de la Universidad Autónoma de la Ciudad de México, explicó que la mayoría de los casos confirmados no presenta síntomas porque la adaptación del virus al cuerpo varía en cada sistema inmune.
“Hay que tener muy claro que va a haber pacientes que presenten síntomas y pacientes que no. La respuesta del cuerpo hacia el patógeno es distinta en cada persona, por lo que pueden existir pacientes infectados que no desarrollan ninguna sintomatología. Una hipótesis sugiere que los pacientes de menor edad no desarrollan síntomas pese a estar infectados, lo que los vuelve potencialmente contagiosos, sin embargo, seguimos sin saber qué porcentaje de la población es asintómatica”, explicó Torres.
Y aunque la población más vulnerable son los adultos mayores y quienes tienen antecedentes de enfermedades como diabetes o hipertensión, el director general de la OMS, Tedros Adhanom advirtió que los jóvenes también pueden ser casos graves de COVID-19.
“No son invencibles, este virus puede llevarlos al hospital durante semanas o incluso matarlos”, dijo Adhanom y llamó a los jóvenes a tomar conciencia del virus y sus consecuencias.