Por Luis Enrique Cauich
SOLFERINO, LÁZARO CÁRDENAS, 31 de marzo.- El COVID-19 aún no ha tenido presencia en el Municipio de Lázaro Cárdenas, pero ha estado a punto de ocasionar un conflicto social entre comunidades de la zona norte, luego de que este domingo por la tarde surgiera un conato de enfrentamiento entre habitantes de Solferino y taxistas de Chiquilá, al grado que la comunidad de San Ángel anunció el cierre de la carretera a Kantunilkín, pero luego de un diálogo con las autoridades, todo retornó a la tranquilidad.
En Solferino se habían instalado estrictas medidas para regular la salida de taxis de Chiquilá y la entrada a la zona para habitantes de Kantunilkín y San Ángel, y el acceso al turismo nacional y extranjero o de personas que no sean del municipio se mantenía restringido.
Los taxistas habían denunciado que no se les permitía salir para Kantunilkín, mucho menos para Cancún a llevar a turistas que salían de Holbox. Incluso hubo acusaciones entre habitantes de Solferino y Chiquilá por el filtro, al grado que se registró un conato de enfrentamiento este lunes por la tarde.
Aunque las autoridades ya habían mediado por la mañana, por la tarde un grupo de porteños acudió a Solferino para dialogar con los representantes o responsables del filtro, pero estos convocaron a la comunidad, lo que estuvo a punto de generar un enfrentamiento. Sin embargo algunos habitantes de Solferino pidieron a los visitantes retirarse del lugar para no llegar a golpes y buscar el diálogo a través de las autoridades municipales.
De hecho, habitantes de San Ángel denunciaron que tampoco se les permitía el paso para Holbox, donde aun mantenían su trabajo, amenazando con cerrar la carretera para impedir el acceso de productos básicos hacia esa localidad en represalia por no dejarlos cruzar en su retén.
Hubo momentos de tensión, pero más tarde se dio a conocer que se había llegado a acuerdos para el libre tránsito para habitantes del municipio hacia la isla de Holbox, para quienes aún estuvieran trabajando ahí, pero se mantenía la prohibición de entrada de turistas nacionales y extranjeros.
Los habitantes de Solferino, durante un diálogo con autoridades municipales la tarde de este martes, que se extendió por varias horas, señalaron que el filtro estricto no se hace con mala intención, sino que buscan que la pandemia no llegue hasta estas zonas.
Señalaron como más importante la salud y el bienestar familiar que los recursos económicos, y aunque se exponen a ser contagiados con estas medidas, lo primordial por el momento es mantenerse firmes para evitar la llegada del COVID-19 a esta región, aunque muchos se opongan o busquen sus intereses económicos.
El COVID-19 no ha llegado a la zona, pero genera preocupación, estrés, tensión y hasta enojo por las personas que no acatan las recomendaciones. También genera diferentes puntos de vista u opiniones en las que no hay acuerdo y se generan los conflictos que de las palabras pasan a los hechos, rompiendo la tranquilidad cuando deben prevalecer la cordura y sensatez para poder hacerle frente de manera conjunta a la pandemia.