La mayoría de locatarios del mercado Ignacio Manuel Altamirano reanudaron actividades
* La asistencia aún es escasa, pero se muestran optimistas de que pronto llegarán sus antiguos y nuevos compradores
* En el lugar se aprecia una mayor higiene con las debidas medidas de protección sanitaria
Ricardo Jesús Rivas
CHETUMAL, 23 de junio.- En espera de clientes y bajo medidas de sanidad se encuentran los locatarios y vendedores del mercado Ignacio Manuel Altamirano. Los vendedores se muestran optimistas para recibir a sus antiguos y nuevos clientes. En el lugar se pudo apreciar una mayor higiene de la habitual, a pesar de ser mediodía.
Las campañas negativas en medios de comunicación sobre el estado que guardan las instalaciones del mercado Ignacio Manuel Altamirano y los casos de COVID-19 que se han registrado en el lugar, han derrumbado las ventas y mantienen en la zozobra a los comerciantes del lugar.
Únicamente la unión y determinación de los locatarios y comerciantes del sitio han hecho trascender hasta el momento una serie de golpes bajos en los que también ha participado el gobierno municipal de Otoniel Segovia Martínez.
Al llegar a las instalaciones del centro de abasto, se puede apreciar un filtro sanitario establecido por el grupo de centinelas de la Policía Municipal, quienes desinfectan las manos de los consumidores y verifican que porten cubrebocas antes de ingresar.
Ya en el interior, el aspecto del piso y área de trabajo de los carniceros y fruterías es mucho mejor que antes de la crisis sanitaria. De la misma forma, la atención es muy amable y los productos tienen buena presentación.
Propietarios de los comercios dijeron a este medio informativo su preocupación por el nulo apoyo de los tres niveles de gobierno y las escazas ventas, aunado a las campañas mediáticas fuertes en su contra, tildándolos de focos de contagio.
Sin embargo, mantienen el ánimo en espera del retorno de sus clientes, a quienes prometen servir como nunca, pues todos los días mantienen una higiene con el fin de cuidarse y cuidarlos.
Desafortunadamente, fuera del área de carnicerías y fruterías son pocos los establecimientos que han vuelto a levantar sus cortinas, por lo que la mitad del mercado se aprecia cerrado.