Un abuelito que vagaba sin rumbo en las calles de la colonia Andrés Quintana Roo de Cozumel, fue interceptado por una mujer quien lo observó desorientado y quien le aseguró que había salido de su casa a caminar, pero se perdió y no sabía cómo retornar. Los elementos preventivos lo trasladaron a las instalaciones de Seguridad Pública para mantenerlo en la recepción de forma segura mientras localizaban a sus familiares; minutos después, sus familiares llegaron por él.
Por la tarde de este miércoles, una mujer que tiene su vivienda sobre la avenida 25 entre las calles 13 y 15 de esa colonia, se percató que un abuelito se encontraba parado frente a su casa, por lo que no le tomó importancia en ese momento, ya que pensó que se encontraba acompañado.
Sin embargo, luego de unos minutos, observó que cruzó la calle y posteriormente regresó al mismo punto, lo que le apreció extraño, ya que en ese momento constató que se encontraba sin compañía alguna. La mujer al abrir la puerta y salir, le preguntó si necesitaba de ayuda, recibiendo como respuesta que no sabía cómo regresar a su casa, ya que estaba perdido.
La fémina le ofreció un vaso de agua y una silla, mientras solicitaba la intervención de las autoridades a través del 911, ya que el abuelito se encontraba desorientado. El personal del C5 envió una unidad policiaca hasta el lugar, Minutos después, los elementos preventivos de la corporación policiaca municipal, arribaron al sitio auxiliando a la persona de la tercera edad.
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Los elementos procedieron a activar los protocolos para salvaguardar la integridad del octogenario, trasladándolo a las instalaciones de Seguridad Pública de Cozumel, ya que en su condición, podría ser víctima de algún delito. En la recepción de la corporación policiaca, al abuelito le solicitaron su nombre y su edad para poder adquirir información que les pueda llevar a encontrar a sus familiares o la ubicación de su hogar.
Justo en ese momento, llegó hasta esas instalaciones, un par de personas para reportar que F.J.E, había salido de su domicilio y necesitan ayuda para encontrarlo. Segundos después se percataron que se encontraba sentado en el sitio, por lo que se identificaron como los familiares del señor F.J.E. de 88 años de edad, acreditando el parentesco con el abuelito, a quien le regresó la sonrisa en el rostro al ver a la pareja.
Los elementos le emitieron las recomendaciones para que esa situación no vuelva a suceder, ya que podrían estar en riesgo su integridad al estar solo y desorientado en la vía pública.
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CG