Jimena Santos, una joven que labora como repostera en un complejo hotelero, ha denunciado que los transportistas ya no respetan el aforo permitido por el Semáforo Epidemiológico Amarillo en la que se encuentra el municipio de Solidaridad.
“Pareciera que el virus ya no existe en el municipio, pues a los choferes les importa más el dinero que su vida misma y la de sus pasajeros”, dijo la joven.
Y es que al realizar un recorrido, por lo menos en dos colonias, se pudo apreciar que los choferes del transporte público llevan hasta 15 pasajeros en las combis, pues aseguran que ya se puede llevar el 100 por ciento del aforo permitido.
“A mí me dijeron que ya puedo, ya me dieron luz verde”, alcanzó a decir en tono molesto uno de los conductores, quien no quiso informar su nombre ni qué autoridad había sido la que les había autorizado el aforo completo.
Trabajadores del ramo hotelero indicaron que ellos diariamente deben de tomar el transporte público para dirigirse a su área de trabajo y que se protegen para no llevar el virus a su hogar, pero desafortunadamente se arriesgan todos los días al subirse a la unidad de transporte.
“Vivo con mis papás, mi mamá de 55 y mi papá de 59, aún no se han vacunado y cada que voy a trabajar rezo para no venir infectada y contagiar a mi familia, debo de tomar la combi dos veces al día y lo hago cuando son las horas pico, que son a las 6:00 am y a las 5:00 pm, en ese horario las combis van repletas exponiendo el chofer a los pasajeros que vamos, pues hay personas que ya dentro de la van se quitan el cubrebocas, o lo peor es que se lo quitan para estornudar o toser”…
“Yo pido que realmente las autoridades que hagan algo, porque si llegamos a pasar a una semaforización en verde esto se va a descontrolar, darán por hecho que ya no se necesita cubrebocas para subir a la unidad”, informó Itzel Carrillo.
En algunos paraderos de combis en el centro de la ciudad se encuentran los inspectores de la Dirección de Transporte Público verificando que cumplan con el aforo permitido, pero sólo donde se encuentran ellos ubicados, ya que al pasar esos ‘filtros’ comienzan a subir hasta 15 personas a la unidad.
MR