Más de mil hectáreas de manglar han sido afectadas a falta de mantenimiento y control por parte del municipio de Benito Juárez en lo que fue el basurero de Cancún, ubicado en la zona continental de Isla Mujeres cercana a Rancho Viejo; el biólogo Gonzalo Aldana, encargado de Áreas Naturales Protegidas en la Zona Norte, aseguró que a pesar de que dicha área no recibe residuos desde 2005, el proceso de descomposición de los desechos vertidos ahí en el pasado sigue contaminando el subsuelo.
“El basurero que nos ocupa se llama “Antiguo Basurero Norte de Cancún y su celda emergente ya no recibe desechos desde 2005, pero la basura que se recibió continua su proceso natural de descomposición y por tanto, genera lixiviados, estos contaminantes descienden y contaminan el suelo, el manto freático y todos los cuerpos de agua del Sistema Lagunar Chacmochuch el cual forma parte de la Reserva de la Biosfera del Caribe Mexicano.
El biólogo Aldana también aseguró que este basurero de 18 hectáreas representa un riesgo para la vida silvestre y acuática de dicha franja. “Es un riesgo para todo el complejo de humedales y manglares de la zona, para la vida silvestre y acuática, ya que Chacmochuch es un sitio de crianza de peces, es decir, sitio de desove y luego regresan al mar”, refirió el entrevistado, quien agregó que hace falta una sanción a la autoridad municipal para que tome cartas en el asunto. “Hace falta que el Gobierno del Estado, mediante la Procuraduría de Protección al Ambiente (PPA) les establezca un procedimiento administrativo y los multe” enfatizó.
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Representantes deÁreas Naturales Protegidas de la Zona Norte aseguran que Cancún no cuenta con rellenos sanitarios, pues ni en el viejo ni el nuevo se revolvía la basura hasta crear un conjunto y luego realizar su depósito, “por lo que solo son basureros”.
El primer basurero de Cancún no ha recibido residuos desde 2005 y ambientalistas refieren que el problema comenzó desde hace 20 años, cuando dejaron de inyectarle dinero para su debida utilización y clausura, debido a que en aquel entonces, autoridades no tomaban la responsabilidad de dicha zona por considerarla federal, pero en 2007 una empresa canadiense quiso aprovechar el biogás y la administración de Julián Ricalde Magaña trató de aplicar una concesión, por lo que la empresa decidió retirarse del municipio.
Ambientalistas y personal de Áreas Naturales Protegidas de la Zona Norte solicitan que intervengan las autoridades de forma inmediata, pues a pesar de no darle el debido tratamiento a esta zona, los asentamientos de población crecen a su alrededor, lo cual podría generar una incubadora de enfermedades que terminen por afectar al resto de la población en su salud y forma de vida.
RM