Derivado de la cantidad de sargazo que ha arribado a las costas quintanarroenses, los prestadores de servicio de buceo han detectado ya en algunas zonas arrecifales la presencia de la macroalga, lo que pone en peligro su existencia y desarrollo.
De acuerdo con Ramón Magaña, buzo profesional, representante de una empresa privada, “nos ha tocado ver en los últimos días, que mucho de ese sargazo ya pesa, tiene un peso considerable, se hunde y al hundirse cubre ciertas partes de los arrecifes, lo que es delicado”.
El buzo mencionó que “un simple rozón con la aleta de un buzo, le haces daño, y si le pones carga de cientos de kilos de sargazo, los lastimas, porque no permite la entrada de luz, no se puede alimentar, reproducir y lo va matando, en ese sentido sí afecta”.
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Lo último al mencionar que para la actividad turística que desarrollan por ahora no ha sido factor la presencia de la talofita, aunque de seguir así, podría haber afectaciones, “Si no se hace nada y sigue llegando a los arrecifes, afectará directamente la actividad".
“Aquí no hay necesidad de alejarnos para ver el sargazo, con ir a la playa se ve y sigue llegando, afuera se ven los manchones, bastante sargazo en los lugares más apartados donde no hay limpieza”.
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Ramón Magaña reconoció que en las playas públicas se hace limpieza por parte del gobierno, pero hacia la parte Sur, donde no se tiene presencia de nadie, “es grave la situación por el recale del sargazo”.
No hay que olvidar que la mayoría de los hoteles hacen esfuerzos propios para retirar el sargazo, pero la cantidad que está recalando esta temporada, rebasa a muchos, como ha quedado en evidencia, ya que ni la Secretaría de Marina logró contener el que llega a Playa del Carmen.
RM