Jovencita lleva a sus perros a defecar al parque que se encuentra junto a la Biblioteca Pública y de acuerdo con testigos no es la primera vez que lo hace; y en las playas, a pesar de que está prohibido introducir canes al agua, hay gente que insiste en estas malas prácticas.
Este día fue vista una joven, quien vive por la zona de la 30 Avenida y que de acuerdo con lo observado, sale de su casa para dirigirse a un parque que se ubica exactamente junto a la Biblioteca Pública “Gonzalo de Jesús Rosado Iturralde” y lo hace acompañada de dos mascotas, a plena luz del día.
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El problema es que lleva a sus animales a defecar en el arenero de este parque y a decir de varios testigos que han observado la misma situación, aseguran que no es la primera vez que esta joven lleva a este mismo sitio a sus mascotas.
Los propios testigos mencionan que la joven ni siquiera se toma la molestia de recoger las heces fecales de sus mascotas y se retira del lugar como si nada hubiera pasado.
Las personas que han visto el comportamiento de esta joven prefieren no reportarla al 911 o al área de ecología por tratarse de una muchacha, pero están conscientes de que está actuando mal al llevar a sus perros a defecar en un parque público.
A pesar de que son pocos los niños que utilizan este parquecito, debido al tema de la pandemia, hay familias que de vez en cuando acuden por las tardes a sentarse en las bancas que hay en el área, mismas que van acompañados de algunos menores.
Por otro lado, también se ha observado que todavía hay personas que llevan a sus mascotas a remojarse al mar a pesar de ser una práctica que está prohibida, sobre todo porque muchos niños acuden a los balnearios públicos.
Autoridades de Ecología recomiendan a las personas que meten al mar a sus mascotas a que dejen de hacerlo.
No obstante, en la isla hay una buena cultura de personas que sacan a caminar a sus mascotas por las calles y avenidas de la isla al llevar sus bolsitas para recoger las heces de los animales, pero todavía hay quienes no lo hacen.
Las heces caninas representan contaminación ambiental ya que facilita la transmisión de zoonosis parasitarias, especialmente las causadas por nematodos intestinales del perro, además de que produce en promedio 300 gramos de excremento por día y medio litro de orina.
Por ello la importancia de recoger las heces fecales de estos animales cuando los sacan a caminar ya que no sólo es para ejercitarlos, pues es una forma de evitar y prevenir enfermedades y contaminación.
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JCL