Estudiantes, taxistas, obreros, empresarios, prestadores de servicios turísticos y un extranjero fueron parte de las 62 vidas que se cobró la delincuencia en Quintana Roo en el mes que recién culminó, entre ellas, tres mujeres y tres menores de edad; el mes pasado se registraron 37.
Las filas de la Policía del Estado también se vieron violentadas luego de que sujetos intentaran ejecutar a un elemento en Cancún y dispararan contra la casa de un agente de Tránsito.
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Cierre sangriento de marzo en Cancún: Matan a tres hombres en distintos puntos de la ciudad
En Playa del Carmen se registraron cifras históricas, al ser asesinadas cinco personas en un solo día; posteriormente, una ola de ataques a locales continuó provocando temor, principalmente entre comerciantes.
Parte de los escenarios que los responsables utilizaron para dar a conocer sus crímenes fue la entrada de una escuela primaria, donde niños de 10 años y menos, sin extrañarse, observaron el cadáver maniatado de un hombre, el cual permaneció por alrededor de tres horas tendido.
Confiesan 13 homicidios
Por otra parte, homicidas detenidos confesaron cómo cometieron al menos 13 asesinatos en Quintana Roo, algunos bajo el efecto de estupefacientes y otros por temor a ser parte de las víctimas, desmembraron y sepultaron clandestinamente varios cuerpos, un día era más violento que el anterior y la saña con que se llevan a cabo los crímenes aumentó.
Hombres mujeres y niños fueron testigos del mes negro que se vivió en el Estado, donde 62 personas perdieron la vida, cuya principal línea de investigación es la relación con el crimen organizado, 12 más en comparación con marzo de 2021, cuando a pesar del confinamiento por la contingencia sanitaria, la delincuencia continuó superando a las autoridades y dejó como saldo 50 muertos.
En los últimos 31 días transcurridos, algunas de las víctimas fueron asesinadas a balazos afuera de sus viviendas o mientras manejaban, otros cuerpos aparecieron repartidos en bolsas abandonadas en la vía pública, e incluso algunos fueron torturados tras ser privados de la libertad y luego arrojados en caminos en medio de asentamientos irregulares.
Ya no sorprende a los habitantes de uno de los focos rojos de la violencia en Cancún vivir cerca de un cementerio clandestino, el cual descubierto una vez que los presuntos homicidas detenidos confesaron sus crímenes.
Para la gente que habita en esa zona, era de esperarse que, cerca de sus viviendas, un domicilio fuera utilizado como casa de seguridad, donde se mantenían a personas en cautiverio y tras ser cruelmente asesinadas, fueron sepultadas a unos metros, por la falta de vigilancia.
Sumado a estos homicidios, delincuentes a modo de “aviso”, incluso para la Policía Quintana Roo, dispararon contra personas, 26 lograron sobrevivir a estos atentados, entre ellas cuatro menores, quienes al estar en el lugar y momento equivocado, fueron alcanzados por una bala perdida, así como un Comandante de Sector en Cancún, quien se encontraba de vacaciones y junto a su familia, recibió tres disparos por la espalda estando a unos metros de su vivienda, en el fraccionamiento Villas del Mar, en la Supermanzana 248.
Ataques por “derecho de piso”
En otros ataques armados, 16 establecimientos, cuyos encargados presuntamente son víctimas del cobro por derecho de piso, sufrieron daños y tres personas resultaron heridas, entre ellos cuatro bares en Playa del Carmen.
La primera semana se registraron ocho ejecutados, entre los cuales estaba un menor de 17 años.
No alertó a las autoridades nada de lo que se estaba viviendo, no sólo en las regiones o colonias señaladas como puntos rojos, donde las estrategias policiales no han dado resultados, sino también en los primeros cuadros de Cancún, Tulum y Solidaridad.
La jornada violenta del mes culminó con el asesinato de un hombre la noche de ayer, quien mientras reparaba un auto afuera de un domicilio, en la Supermanzana 75 de Cancún, fue atacado a balazos. Al menos dos heridas a la altura de la cabeza fueron las que cegaron su vida, consumándose la ejecución número 62 del mes y la 132 en lo que va del año en Quintana Roo. De los ejecutados, 10 murieron tras ser torturados, 13 fueron desmembrados y 39 recibieron disparos.
Uno de los casos que causó indignación en Cancún fue el de dos menores de 16 años de edad, acribillados cuando llegaban a su vivienda en el fraccionamiento Villas Otoch Paraíso, de la Supermanzana 259. Los adolescentes, quienes habían invitado a salir a una joven, terminaron sin vida pues a la mujer se le relacionó con integrantes de una célula delictiva en Quintana Roo, quienes los mataron en venganza.
Mientras que en Playa del Carmen, el pasado jueves 24, se registraron cifras históricas cuando cuatro hombres fueron hallados muertos, con visibles signos de violencia, en Villas del Sol y un quinto cuerpo embolsado fue localizado horas después; el ruido de disparos, o los gritos de auxilio de alguna víctima fue lo que avisó a los habitantes que se había cometido un crimen, los cuales, en su mayoría, permanecen impunes.
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CG