El movimiento biosocial denominado “Oasis Maya” lanzó esta petición a través de la plataforma henge.org, para que los predios costeros que aún se mantienen sin actividad humana en la zona de la colonia Luis Donaldo Colosio de Playa del Carmen, el Gobierno Federal los mantenga como un “pulmón verde”.
Hay que recordar, que la Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano (Sedatu) publicó, en diciembre del año 2021, el acuerdo por el que mil 200 hectáreas que fueron destinadas al fundo legal para la población de Playa del Carmen, fueron devueltas a la Federación.
De estas mil 200 hectáreas, son aproximadamente 40 que van desde la avenida CTM hasta Punta Esmeralda, paralelas a la Quinta Avenida, y que piden se destinen a este pulmón, por ser el último que queda en la zona urbano-costera de Playa del Carmen.
“En Oasis Maya buscamos promover este espacio como el pulmón verde de la zona urbano-costera, para que sea destinado a la conservación; ya que este espacio representa la memoria biológica de Playa del Carmen, lo único que queda vivo de todo lo que fue en algún momento la vegetación original de esta ciudad”, refieren en su petición que en este espacio viven diferentes especies de flora y fauna, algunas de ellas en calidad de amenazada como la palma chit, así como el manglar y la duna costera, ecosistemas protegidos por las leyes ambientales de nuestro país debido a su relevancia ecológica que contribuye atenuar los efectos climatológicos y erosión de las playas”.
Con el apoyo de biólogos y expertos el organismo se ha dado a la tarea de llevar registros y documentación sobre todas las diferentes especies de flora y fauna que habitan en este pulmón verde; entre las especies de animales que se encuentran, destacan los venados, cocodrilos, el zorro gris, pelícanos, águilas, halcones, gaviotas, garzas, golondrinas, loros, ardillas, mapaches, tlacuaches, cuatíes, monos arañas, oso hormiguero, serpientes, boas, culebras, iguanas, entre otras; además que es refugio de aves migratorias y han documentado el desove y nacimiento de tortugas.
La intención es que, de estas 40 hectáreas, el 95 por ciento sea destinado a la conservación y tan sólo el 5 por ciento de la zona ya impactada para uso biosocial.
Se trata de una iniciativa ciudadana apoyada por la sociedad civil organizada conformada por asociaciones, colectivos y ciudadanos con el único objetivo de tener un espacio destinado a la conservación de nuestra localidad, recordando la importancia de la biodiversidad como pieza clave para garantizar nuestro bienestar y preservación como especie. Por ahora, suman más de mil firmas en esta petición.
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CC