El exregidor Emilio Sosa, un defensor de la revocación del título de concesión de Aguakan debido a la presunta incompetencia del consorcio, ha instado al Cabildo a rendir un informe sobre la demora en esta transferencia. Sosa ha vivido en carne propia el constante aumento del costo del servicio sin mejoras en la presión del agua en su familia, residente en la colonia Lol-Be.
Sosa criticó al Gobierno municipal por su inacción en el proceso de reversión del título de concesión y exigió que la Comisión de Agua Potable y Alcantarillado (CAPA) asuma el control del servicio, ya que Aguakan ha demostrado su incapacidad para garantizar un suministro adecuado de agua a la población. La consulta popular realizada en junio de 2022 fue contundente, ya que la mayoría votó a favor de que Aguakan se retire.
Hace 13 meses, el Gobierno municipal informó que el consorcio había presentado un recurso legal para retrasar la cancelación del título de concesión. En respuesta, el Gobierno municipal recurrió a los tribunales para rescindir el contrato.
En marzo pasado, la incapacidad de Aguakan para actuar ante una emergencia se puso de manifiesto cuando la reparación de un tubo submarino tardó tres días en lugar de las tres horas habituales por parte de los ex trabajadores de la CAPA. Esto ha generado críticas sobre la falta de experiencia de los trabajadores de Aguakan.
Los usuarios han expresado su descontento, señalando que Aguakan ha cobrado de manera indebida en sus recibos y han instado al gobierno municipal a acelerar el proceso de cancelación del título de concesión. También han pedido la intervención de los diputados locales para que CAPA asuma la responsabilidad de los servicios de agua y drenaje en Isla Mujeres, ya que alegan que se les está cobrando por un servicio que no se está proporcionando adecuadamente.
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HS