En comparación con años anteriores, cuando las banquetas de las tiendas de autoservicio y plazas comerciales lucían llenas de puestos de pirotecnia, ahora son muy pocos quienes se aventuraron a dedicarse a la venta de estos productos. Las autoridades buscan frenar la venta de artilugios explosivos, debido a los peligros ampliamente conocidos. Los propios vendedores aseguran que sus ventas han disminuido significativamente en relación con otros años.
Por su parte, Protección Civil recomienda no adquirir fuegos artificiales, incluso aquellos que no contienen pólvora. Es decir, existe una regulación, pero no una prohibición.
Recientemente, las autoridades en Benito Juárez anunciaron que iniciarían operativos para detectar vendedores de pirotecnia. Esto se debe a que está prohibida su venta y también para minimizar cualquier impacto negativo que los fuegos artificiales puedan causar, empezando por posibles accidentes y considerando el malestar de las mascotas debido a la detonación de explosivos.
En fechas como el 15 de septiembre o Navidad, la cancelación de los fuegos pirotécnicos en el Ayuntamiento ha generado opiniones encontradas en la población. Algunas personas aplauden la decisión argumentando que la pirotecnia suele causar estrés y malestar en personas autistas y en las mascotas, además de representar un riesgo para su seguridad. Sin embargo, otras personas defienden estas tradiciones.
El Director de Protección Civil de Cancún, Antonio Riveroll, advierte a la población que es mejor no comprar pirotecnia. La intención es erradicar la pirotecnia de las festividades de diciembre debido al daño que puede causar a personas que no saben usarla, especialmente a niños, y también por el impacto en las mascotas.
“Esa sería la primera recomendación y la segunda, en caso de que adquieran pirotecnia, es que los adultos siempre supervisen a los menores, independientemente de que sólo sean luces o chispas para uso recreativo. Esta prohibición no es exclusiva de Cancún, es a nivel nacional y está relacionada con la Ley Federal de Armas de Fuego y Explosivos, regulada por la Sedena. En el caso de pirotecnia con pólvora, que generalmente ya no se vende, se regula y otorga permisos en hoteles para bodas o en estadios, y hay más permisos para comercialización o almacenaje cuando se trata de más de 10 kilos.
En el caso de los vendedores pequeños que no ofrecen productos con pólvora, sino con químicos que generan chispas, la ley también estipula que se necesita un permiso para su venta. Antes esto no era necesario, por lo que ahora sólo damos recomendaciones para que tengan un extintor, pero reforzaremos el tema preventivo para que, en la medida de lo posible, la gente evite adquirirlos”, concluyó.
Síguenos en Google News y recibe la mejor información
HS