Los socavones son tan “históricos” como el Centro de la capital quintanarroense y abundan en varias calles y avenidas del primer cuadro de la ciudad.
Los ciudadanos intentan rellenarlos con sascab y señalizarlos con llantas, piedras, palos y hasta basura, para alertar a los automovilistas y motociclistas y evitar más accidentes, pues varios conductores han caído en ellos.
Por Esto! documentó algunos de los socavones más evidentes de la zona y entrevistó a residentes sobre esta antigua problemática.
Acusaron que aunque estos agujeros son cada vez más evidentes para la ciudadanía, no ocurre lo mismo con las autoridades, especialmente la alcaldesa Yensunni Martínez, pues poco o nulo trabajo se ha visto para repararlos, para que dejen de ser un problema para los neumáticos de coches y motos.
Dos chetumaleños que pasan junto a los socavones todos los días, para ir a su trabajo o casa, señalaron que estos ya tienen varios meses y no han visto trabajos o gestiones para repararlos.
“Ese hueco tendrá como un año. Como se hizo muy grande, el patrón le puso unas llantas para que no se vaya ningún carro, porque como está en la curva, cuando doblan se pueden ir dentro del hueco, y para salir está difícil. Por eso es que le puso unas llantas para que sirviera como señales de peligro” comentó una trabajadora de una tienda de abarrotes del Centro.
Hay agujeros en las avenidas Zaragoza, Juárez, Othón P. Blanco y en calles aledañas; incluso en los camellones, banquetas y costados de las alcantarillas.
“Hace dos meses no estaba así, era más pequeño, como un bache, pero fue creciendo y como pasan los carros, más se fue hundiendo, y ahora mi patrón le puso una madera que encontró por ahí para que ningún carro se vaya en el hueco y luego resulte peor. Honestamente, no vienen a repararlos, bueno, yo no he visto que vengan a tapar los huecos o baches...
"No vivo aquí, pero trabajo casi todos los días y no he visto nada. Creo que si es peligroso que existan esos huecos, se te puede ir una llanta o una moto y se van a accidentar o la reparación saldría muy cara”. dijo un vendedor respecto a la oquedad que hay en la avenida Zaragoza con Reforma.
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AA