Las inundaciones en el Centro Histórico, debido a deficiencias en la red pluvial, podrían estar relacionadas con casos de infecciones estomacales, incluso un posible caso de cólera, según lo reportado por un visitante que confirmó su diagnóstico con un médico en los Estados Unidos. Esta información fue publicada en un grupo de redes sociales destinado a visitantes y residentes temporales.
El visitante compartió el martes que estuvo en la isla del 30 de diciembre al 4 de enero y que ha experimentado diarrea y vómitos desde el 1 de enero. Además, afirmó haber sido diagnosticado con cólera. Aunque indicó que no quiere generar reacciones negativas hacia Isla Mujeres, expresó su preocupación por la situación. Rápidamente, sus comentarios generaron preocupación entre otros visitantes que planean pasar sus vacaciones en la isla en las próximas semanas.
Hubo recomendaciones de prevención, como evitar consumir alimentos no cocidos o en la calle. Sin embargo, algunos defendieron la seguridad de los alimentos populares, señalando que no han experimentado enfermedades.
Brendan Andrews compartió su experiencia de haber estado en la isla del 28 de diciembre al 5 de enero con un grupo de cinco personas, y ninguno de ellos se enfermó. Destacó la importancia de consumir agua embotellada y alimentos cocidos, evitando vegetales crudos.
En contraste, Barbara Power mencionó que, después de visitar Isla Mujeres con frecuencia durante 20 años, contrajo un virus estomacal el invierno pasado, que le duró cuatro días. La Dra. Greta Shorey la ayudó en su recuperación. Algunos visitantes a distancia también mencionaron que durante su estancia tuvieron que sortear charcos de agua pestilente, particularmente durante la última inundación el pasado 26 de diciembre, cuando el malecón Rueda Medina y otras áreas se llenaron de agua de lluvia, desbordando las alcantarillas.
Ante esta interacción de visitantes preocupados, prestadores de servicios como Rolando Tun y Abelardo Cantú expresaron su inquietud sobre la posible propagación del temor. Reiteraron su llamado al Gobierno municipal para renovar toda la red pluvial y abordar el problema del agua de lluvia de manera efectiva, permitiendo un escurrimiento rápido al mar sin que afecte las alcantarillas.
Hasta el momento, no ha habido una postura institucional sobre el tema. A pesar de la finalización de una obra en el Centro Histórico a mediados de diciembre, algunos comerciantes afectados sostienen que no resolvió el problema de las inundaciones, sino que, en cambio, lo complicó.
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HS