Cuando el campesino pierde la cosecha de maíz en su milpa, que ahora ocurre todos los años, entra en desesperación, por lo que muchas veces esa situación hace que se enferme o, en el peor de los casos, termina por recurrir al robo, orillado por la necesidad de llevarle comida a su familia, porque cuando le sucede esa desgracia, nadie le tiende la mano, indicó el señor Víctor Chan Piña, juez tradicional de la localidad de Cafetalito.
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La preparación de la milpa para la siembra de cada año, no solamente lleva tiempo, sino también requiere inversión económica, porque son varias las actividades que se hacen antes de la siembra y después de la misma (elección del área donde se va hacer la milpa, medición, rosa tumba, quema, siembra, deshierbe, cosecha)
Por eso, dijo cuando el campesino pierde la cosecha se desespera, porque lo primero que piensa es que ya no va tener comida su familia por un año. De igual forma, añadió que, en otros casos, el productor se enferma y se vuelve diabético, porque no puede creer que luego de hacer tantas tareas en el campo y de invertir sus ahorros pierda finalmente la cosecha
También, manifestó, hay que decirlo, existen campesinos que luego de perder su milpa se dedican a robar, porque de alguna manera tienen que llevar comida a su familia.
Comentó, desde hace ya mas de 5 años que el campesino no recibe ningún tipo de apoyo cuando pierde su milpa, porque los del gobierno tienen un salario y no pasan dificultades como sucede con el campesino que depende de sus sembradíos, manifestó.
Refirió que en año pasado muchos campesinos sembraron en junio y se perdió todo, y por lo mismo volvieron a sembrar en agosto y pegó algo de cosecha, pero llegaron los tejones, que ahora son una plaga, y acabaron el poco maíz que dio.
Por lo mismo, ahora iniciando el año, mucha gente de los ejidos está comprando maíz porque no tienen para el consumo, no es que no haya hecho milpa, sino el tiempo no ayuda y por las plagas que abundan.
Según don Víctor Chan Piña, la vida en el campo va ser todavía mas difícil dentro de unos cuantos años, sobre todo si el campesino no recibe apoyo del gobierno para trabajar la tierra; y, agrego, lo que va suceder es que va emigrar, va ir a las ciudades, aunque allá solamente va ir a dar lástima, porque tampoco, se puede decir que un campesino en la ciudad va prosperar, concluyó.
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HS