Los enamorados playenses pasaron por alto la crisis económica y pagaron más de 3 mil pesos por arreglos florales y regalos de todo tipo. De esta gran derrama se beneficiaron los pequeños y medianos comercios quienes le “dieron vuelo a la hilacha” para expender cualquier artículo o presente alusivo al Día del Amor y la Amistad, obteniendo poco regateo de parte de los ciudadanos.
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Vendedores de los centros comerciales señalaron que las ventas iniciaron desde la noche del pasado martes 13 de febrero. Novios, esposos y aspirantes al amor acudieron a comprar adornos, flores, dulces, chocolates y muñecos alusivos al Día de San Valentín.
“Sólo ayer, martes se llevaron 10 de los peluches enormes que oscilan entre 2 mil y 3 mil pesos. Ahora estamos volviendo a llenar la tienda de más peluches y adornos”, indicó un vendedor.
Los empleados de estos establecimientos se lucieron al elaborar adornos y presentes atractivos al ojo humano; sin embargo, el más pequeño rondaba en 350 pesos.
Cuestionados acerca de quien despilfarra más este día, aseguraron que, por mucho, son los varones, quienes adquieren regalos grandes. En cambio, las mujeres suelen comprar cosas más pequeñas, como dulces, pues no sólo regalan a su pareja, también a sus amigos y compañeros de trabajo, dijo Janet Méndez, una vendedora.
Deysi S., mesera, informó que destinó las propinas que ganó este día para comprarle un regalo a su novio y a un compañero del trabajo, al cual le agradece la ayuda prestada durante un accidente laboral.
Los adolescentes como Antonio Muñoz tampoco se quedaron atrás y compraron algún detalle para regalarle sus parejas: aunque la diferencia es que éstos compraron en línea.
“Este ramo de rosas azules, lo compre en Internet, me costó 400 pesos, se lo voy a regalar a mi novia. El mejor regalo del Día de San Valentín que he recibido fue una caja de chocolates, que no me espere”, mencionó.
A lo largo de la avenida Juárez, los establecimientos de ropa o calzado apostaron por diversificar sus negocios e introducir productos alusivos a esta fecha; sin embargo, la competencia desleal de los vendedores ambulantes fue vasta, ya que la gente se puso a vender flores, chocolates y peluches en las banquetas, hasta a 400 pesos cada uno. Precio que pagó José para darle un presente a su novia, Virginia.
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