Los más de 40 “muertos” o fijaciones de cemento instaladas en 2022 para asegurar los 800 metros de la línea de boyas en Playa Norte no tenían el peso adecuado para mantener estable esta línea de seguridad. Ahora se requiere su reemplazo con fijaciones cada 100 metros, señalan los prestadores de servicios.
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Un funcionario de la Capitanía de Puerto pasó por alto este proyecto de reemplazo. Los prestadores de servicios reiteran su llamado al Gobierno municipal y a la dependencia federal para coordinarse y garantizar la seguridad de los miles de visitantes que nadan diariamente, y prevenir nuevos incidentes con hélices, como los ocurridos hace cinco años dicha playa.
Se ha recomendado a Protección Civil el uso de moldes más grandes para las fijaciones, de 80 a 100 kilos, enterrándolos en los arenales del lecho marino para brindar un mayor soporte durante vientos de más de 80 kilómetros por hora, como los ocurridos durante el paso del Frente Frío Número 32, que terminó por romper toda la línea de boyas en la zona. Los meseros Rosendo Noh y Carlos Carballo recordaron que las fijaciones anteriores, con un peso de 50 kilos, no superaron la primera prueba ante un meteoro de mediana fuerza y fueron desplazados de 20 a 30 metros de su ubicación original.
Argumentan que fijar adecuadamente la línea de boyas evitará que algunos tripulantes de navíos amarren momentáneamente sus botes, situación que está prohibida. Los muertos utilizados antes de la pandemia tenían un tamaño considerable, pero ya han caducado.
El objetivo de este requerimientos mantener la línea de boyas en su lugar durante varios años sin necesidad de renovaciones frecuentes, como la ocurrida dos años después de la última instalación, lo que resultó en gastos innecesarios en las pequeñas fijaciones colocadas en el invierno de 2022.
En aquella ocasión, se utilizaron depósitos de 20 litros de aceite comestible para construir las estructuras, los cuales se llenaron con concreto y se les añadió un arillo de fijación para la línea de 800 metros de boyas. Ahora se requerirán depósitos de mayor tamaño para aumentar el peso y cumplir con el propósito.
Geotextiles
Es necesario renovar al menos una línea de 120 metros de geotextiles con un diámetro de tres metros en la parte Oeste del balneario para evitar el deterioro frecuente de más de 5 mil metros de arena, infraestructura que se desinfló hace 10 años por falta de mantenimiento.
Sin embargo, la familia Cárdenas instaló antes de la pandemia un geotubo de 100 metros de longitud y 1.5 metros de diámetro más cerca de la playa, el cual no funcionó correctamente. Según los concesionarios, se necesita un diámetro de tres metros, similar al original. Por iniciativa del concesionario Carlos Cervera, en 2021 se financió la reposición de una infraestructura de 40 metros en la zona federal concesionada a él, lo que representó una inversión de varios cientos de miles de pesos.
También, la familia Lima requiere al menos una palizada en el lado Oeste de la desembocadura de la calle Carlos Lazo, ya que la más cercana se encuentra a 70 metros. Se ha observado una pérdida de playa en esa área y este proyecto debe prevenir la erosión futura en esa dimensión.
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AT