Locatarios de Plaza Las Américas admitieron que sienten temor de trabajar en un lugar tan inseguro, donde en las últimas semanas se han perpetrado dos intentos de atraco a la misma joyería y una ejecución en el estacionamiento subterráneo. Consideraron que la seguridad es insuficiente y ayer algunos locales permanecieron cerrados.
Con una patrulla y dos policías para toda la plaza amaneció uno de los centros comerciales más concurridos de toda la ciudad. El sitio ha sido escenario de infinidad de hechos delincuenciales a lo largo de los años, desde asaltos, hasta ejecuciones.
Frente a la joyería “Bizarro” se ubica una cámara de seguridad que apunta directamente a ésta, que ha sido “blanco” de dos intentos de asalto en las últimas semanas, por lo endeble en los protocolos de seguridad. Empleadas de esa y otras joyerías cercanas dijeron claramente que no podían hablar del tema, pero en sus rostros se reflejaba el temor.
Otros locatarios cercanos accedieron a dialogar, pero también con ciertas reservas. Comentaron que la seguridad es escasa; además que los clientes que caminan por los pasillos están más pendientes de sus teléfonos celulares que de vigilar el lugar.
“Sí es insegura y no de ahora, desde siempre. Viene mucha gente y nunca hay policías, los guardias que andan por acá se la pasan haciendo otras cosas o se van a los rincones en lugar de hacer rondines, pero tampoco se les puede pedir mucho, porque qué pueden hacer contra alguien armado ¿amenazarlo con su tolete?” preguntó una empleada.
Señalaron que además hay muy pocos guardias. Ayer había apenas tres en toda la plaza y uno de ellos era una mujer. En el exterior había una patrulla de la Secretaría de Seguridad Ciudadana (SCC), con dos elementos, “que seguramente mañana ya no estarán, como sucedió en el anterior intento de atraco, cuando fueron colocados 6 policías fuertemente armados para vigilar dentro de la tienda, algo que duró solo un par de días y los volvieron a quitar”, indicaron.
Algunos locatarios mencionaron que no fueron testigos de los hechos, pero afirmaron que sus compañeros debieron pasar un gran susto y ya todos van con temor a trabajar. “Pero sí da miedo porque no es la primera vez que pasa. Afuera hay una cámara, pero creo que ni sirve, además esa cámara no va a evitar que se cometan lo atracos”, indicó otra empleada.
Además, reconocieron que esos policías que habían enviado para vigilar no duraron mucho y si bien la gente no ha dejado de ir a la plaza, algunos visitantes si reconocieron que ya lo piensan dos veces y optan mejor por ya no llevar a sus hijos menores.
Hallan vehículo de los presuntos delincuentes
La motocicleta que presuntamente usaron los atracadores de Plaza Las Américas fue encontrada al mediodía de ayer, abandonada en calles de la colonia Donceles 28, en la Supermanzana 64. Se presumió que se trata de una banda dedicada al robo con violencia en Cancún.
Elementos de la Policía Estatal de Investigación localizaron la motocicleta Italika V200 color negro con blanco, sobre la calle Guadalupe Victoria y avenida Miguel Hidalgo, en la Supermanzana 64, luego del monitoreo de las cámaras de los comercios de la plaza y del Complejo de Seguridad (C5).
Tras verificar que se trataba del mismo vehículo, se revisó el número de serie, el cual arrojó que contaba con reporte de robo, por esta razón fue asegurada para ponerla a disposición del Ministerio Público en la Fiscalía Especializada en Combate al Robo a Comercio.
Asimismo, fuentes policiales coincidieron en que, tras analizar los videos, se pudo determinar que hay similitud en las personas que participaron en el intento de robo a la misma joyería, el pasado 28 de enero, y los que intentaron asaltarla el domingo. Con estos datos se presumió que se trata de una banda dedicada a este delito.
También se piensa que es el mismo grupo delictivo que el pasado 12 de enero asaltó la joyería Arte, ubicada en la Gran Plaza, pues el modus operandi es similar y los rasgos de los asaltantes, al parecer, coinciden.
Aunque hasta el momento no hay ninguna persona detenida, la Policía Ministerial, en coordinación con la Secretaría de Seguridad Ciudadana, continúa con las investigaciones.
Respecto a reforzar la seguridad en los centros comerciales, que se había mencionado tras el primer intento de robo en enero, quedó en pausa, ya que la administración de la plaza no quiso contratar el servicio de la Policía Auxiliar, el cual ronda entre los 40 a 42 mil pesos por uniformado, en turnos de 12 horas.
Renán Baeza Sosa, director de la Policía Auxiliar, anteriormente había declarado que a diferencia de las empresas de seguridad privada, estos son policías tienen armas, están equipados y cuentan con una línea directa con el C5.
Sin embargo, al parecer para la administración los costos son muy elevados, pues desistieron. Los guardias actuales no están armados ni capacitados para actuar ante un hecho de alto impacto.
Aumenta sensación de inseguridad
La sensación de inseguridad en Cancún ha aumentado considerablemente debido a los hechos violentos de los últimos meses.
Aunque el robo del 16 de marzo fue frustrado, las detonaciones de arma de fuego generaron alarma entre los presentes y contribuyendo a la percepción de un clima de inseguridad que afecta tanto a los residentes como a los turistas.
Este tipo de situaciones no es nuevo para Cancún. En los últimos tiempos, los reportes de asaltos, balaceras y robos en áreas públicas se han vuelto más frecuentes, lo que ha intensificado el temor de los habitantes. Una de las afectadas por esta creciente preocupación es Ameli, una residente de desde 1983, quien afirmó que ya no se siente segura. “Ya no salgo de noche, Cancún ya no es lo que era antes. Ahora todo se siente inseguro, ya no es como hace años, cuando podías caminar tranquilo por la ciudad”, compartió.
Esta percepción ha sido confirmada por la Encuesta Nacional de Seguridad Pública Urbana (ENSU), que revelan que el porcentaje de ciudadanos que consideran a la ciudad insegura aumentó del 73.2 al 74.1 por ciento entre el tercer y cuarto trimestre de 2024. Estos datos reflejan un creciente malestar en la población, que ve cómo las condiciones de seguridad en la ciudad se deterioran cada vez más.
Asimismo, turistas que visitan Cancún se han visto sorprendidos por los recientes incidentes. Un par de jóvenes de Veracruz compartieron su sorpresa ante la inseguridad. “Vinimos con la idea de que Cancún era un lugar tranquilo, pero lo que pasó en Plaza Las Américas nos dejó impactados. No pensábamos que algo así pudiera ocurrir aquí”, mencionaron.
Para ellos, el incidente cambió su visión de Cancún, un destino que hasta entonces consideraban seguro y relajado.
Este creciente sentimiento de inseguridad, alimentado por diversos hechos criminales, ha afectado tanto a los residentes como a los turistas. Aunque las autoridades locales han intensificado sus esfuerzos por combatir la delincuencia, la sensación de vulnerabilidad sigue siendo una constante para quienes habitan y visitan la urbe.
