Habitantes de la comunidad de Carlos A. Madrazo, del municipio de Othón P. Blanco, se encuentran en un estado de incertidumbre ante la aparición de, al menos, seis perros y un gato envenenados en un lapso de dos días, toda vez que temen que estas acciones sean una táctica para dejarlos en vulnerabilidad y entrar a robar a las viviendas de la zona.
De acuerdo con lo dicho por algunos de los afectados, las mascotas que murieron fueron envenenadas con alimentos, y sospechan que la persona que haya hecho eso posiblemente esté buscando la manera de ingresar a las casas, pues la mayoría de los animales que han muerto son perros, los cuales suelen ser vistos o empleados como guardianes de las familias y los predios.
Asimismo, este suceso ha generado una evidente desconfianza en la comunidad, toda vez que se trata de un lugar en el que los habitantes suelen mantener una convivencia pacífica, además de que la mayoría se conocen entre sí, por lo que no se explican por qué alguien del poblado estaría atentando contra la vida de las mascotas.
En ese sentido, los pobladores han exigido mayor presencia de las autoridades, ya que los elementos de la policía casi no tienen presencia en el lugar, y luego de estos hechos, temen que comience una ola de robos, por la que no sólo se vean afectadas las familias en cuestión de pérdidas materiales, sino también, por la posibilidad de ser víctimas de alguna agresión o delito que ponga en riesgo su integridad.
Por otra parte, los propietarios de las mascotas afectadas también hicieron un llamado a las autoridades para que se inicien las investigaciones correspondientes a los siete casos de envenenamiento, recordándoles que el maltrato animal ya es considerado un delito en el país, y la muerte ocasionada de manera intencional, que además conlleve dolor, forma parte de una de las modalidades de maltrato hacia los animales. Además, esperan que la intervención de las autoridades evite que se registren más muertes.