En desperdicio unidades móviles de 230 millones de pesos. Si bien durante el sexenio pasado fueron parte de una estrategia de salud pública por parte del gobierno estatal, actualmente se encuentran en condición de abandono; situación que fue reportada por ciudadanos que señalan que ahora se han convertido en chatarra.
A un costado de las instalaciones de la Secretaría de Salud, con domicilio en la avenida Chapultepec entre avenida Francisco I. Madero y José María Morelos, en la ciudad de Chetumal, se encuentra estacionada una de las unidades que fue parte de las caravanas móviles de salud durante el sexenio pasado, en una situación de abandono total.
Mediante redes sociales se realizó una denuncia ciudadana al respecto, en la que se señaló que, al no ser utilizada, esta unidad ha pasado a ser considerada un cacharro, pues a simple vista se perciben las condiciones en que se encuentra, toda vez que tiene las llantas ponchadas, en el costado derecho le falta una parte a la carrocería e incluso los logos oficiales se han vuelto casi imperceptibles.
Otro aspecto cuestionable es que la unidad permanezca en la calle, ocupando un espacio público en una de las avenidas transitadas del centro de la ciudad, cuando la dependencia cuenta con un espacio de estacionamiento a sólo unos metros de donde se encuentra la unidad abandonada.
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Cabe mencionar que fueron las 12 unidades móviles que en su momento anunció con bombo y platillo el exgobernador Carlos Joaquín, como parte de una millonaria inversión en materia de salud pública que beneficiaría principalmente a las comunidades; a la que se destinó un monto de más de 200 millones de pesos, sin embargo, tras el fin de su administración las unidades fueron abandonadas.
Si bien el actual gobierno estatal ha implementado una iniciativa similar con las caravanas de “Salud para todos”, las unidades con las que brindan el servicio a los quintanarroenses son parte de una nueva inversión en este rubro, a pesar de que el fin para el que son utilizadas es el mismo. En ese sentido, las unidades tuvieron una vida útil de sólo tres años, teniendo en cuenta que fue en 2019 cuando se anunció su implementación y para el 2022 se dio el cambio de gobierno.