Fuentes de la Fiscalía General del Estado (FGE) aseguraron que los hechos acontecidos a lo largo de la semana que culminó en la Delegación Alfredo V. Bonfil, es por la guerra entre grupos criminales antagónicos; aunque no especificaron cuántas células tienen presencia en la zona, ni los avances en las carpetas de investigación o las estrategias que están tomando para bajar los índices delictivos, ya que los habitantes mencionaron que las autoridades únicamente acuden cuando hay víctimas, a pesar de las constantes denuncias.
Los cuerpos encontrados en una cisterna en el interior de un predio abandonado, ubicado a espaldas del Colegio de Bachilleres, se suman a los siete hechos ocurridos en días pasados en las calles del ejido.
Con relación a este multihomicidio, las autoridades confirmaron que corresponden a tres hombres y una mujer, quienes fueron torturados, atados de pies y manos y finalmente agredidos a balazos.
Con la intención de desaparecerlos, los responsables los dejaron en el lugar, donde de manera anónima fueron denunciados.
Los restos de otras tres personas, ubicados a unos metros, en una fosa clandestina, pudieran contar con ficha de desaparición, por lo cual ya investigan.
Luego del operativo realizado en el interior del predio que presuntamente perteneció a un líder criminal y que le fue asegurado por la extinta Procuraduría General de la República (PGR), las autoridades dieron a conocer que en el lugar encontraron cuatro cuerpos dentro de la cisterna, donde en días pasados fueron abandonados.
Por las evidencias encontradas se presume que ahí los llevaron con vida y tras ser torturados, fueron asesinados, uno de ellos decapitado. Entre los occisos podría haber un menor de edad.
Aunque el caso lo están manejando con total hermetismo, la misma fuente reveló que existía el antecedente que habían sido privados de la libertad y posiblemente pertenecían a un grupo delictivo, sin dar más detalles.
En relación con los tres cadáveres localizados en las calles, al momento que llevaban las diligencias para rescatar los cuerpos de la cisterna, mencionaron que podrían contar con ficha de búsqueda, aunque serán examinados con la finalidad de obtener el ADN que ayude a su identificación; asimismo, se basarán en los indicios, como prendas de vestir y otras pertenencias, para su identificación.
Días de guerra
Martes. La delincuencia se agudizó y fue notoria la presencia de células delictivas a partir de la mañana del pasado martes, cuando una vivienda ubicada en la calle Carlos Salinas de Gortari con Baja California fue atacada a balazos. En el lugar se dijo que una mujer había sido privada de la libertad y posiblemente sea una de las víctimas halladas en una cisterna el sábado.
Miércoles. Los vecinos despertaron al escuchar disparos cerca de sus hogares. Algunos decidieron no salir para llevar a sus hijos a la escuela, por temor a quedar en medio de las refriegas. El resto del día estuvieron llamando al número de emergencias 911, refiriendo que había balaceras en distintos puntos de la ciudad. Las autoridades no encontraron nada, tomando como falsos los llamados de auxilio.
Jueves. La cabeza de un hombre fue localizada en la calle Serapio Flota. Los responsables balearon una vivienda y frente a ella abandonaron la extremidad. El resto del cuerpo, al parecer, fue hallado el sábado entre los cadáveres dentro de una cisterna. A unas calles de donde fueron encontrados los restos humanos hallaron granadas y casquillos percutidos en una casa.
Viernes. Dos casas y tres autos fueron blanco de ataques en las calles Magaly Achach y Francisco I. Madero. Uno de los vehículos resultó calcinado en su totalidad, al ser alcanzado por bombas molotov.
Sábado. Los cuerpos de tres hombres y una mujer fueron localizados en una cisterna dentro de un predio abandonado, ubicado en las calles Pedro Joaquín Coldwell y Miguel de la Madrid. Horas después, tres cuerpos más fueron encontrados en una fosa clandestina, en la avenida Luis Echeverría.
Ante estos hechos, que no son nuevos para los habitantes, mencionaron que ocurren por la falta de presencia policiaca en la zona, por lo que se sienten abandonados por las autoridades, quienes sólo blindan las calles cuando hay un hecho de alto impacto.
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NR