Los cenotes, cuerpos de agua, en su mayoría subterráneos, son de los atractivos que más llaman la atención de los turistas nacionales y extranjeros que llegan a Yucatán, pero en algunos está prohibido bañarse.
Estas dolinas inundadas toman su nombre de la palabra maya "dzonot" que significa "abismo" y se alimentan de agua por la filtración de la lluvia y por las corrientes de los ríos que nacen en el corazón de la tierra.
No se sabe a ciencia cierta la cantidad de cenotes que hay, no solo en Yucatán, sino en toda la Península; pues a pesar de haber un registro, aún quedan muchos por descubrir; además de que hay otros dentro de predios particulares donde no hay acceso al público.
Cuzama, Valladolid, Homún, son los municipios donde se han encontrado más cenotes y que la mayoría están abiertos para bañarse y disfrutar de sus aguas cristalinas y frescas.
Cenotes prohibidos
Xcalah
Pese a la riqueza cultural e histórica de los cenotes, en los últimos años, la contaminación es una amenaza para estos cuerpos de agua, por lo que algunas han tenido que cerrar su acceso a los visitantes, como el caso del que se encuentra en Dzibilchaltún.
El cenote Xcalah en la Zona Arqueológica de Dzibilchaltún se encuentra desde mediados del año 2022 al registrarse altos niveles de contaminación y presencia de heces fecales, por lo que ni siquiera se considera su reapertura.
San Mateo
Otro cenote que se encuentra cerrado para los turistas desde 2019 es el ubicado en la comisaría San Mateo, que fue abierto en 2015 como una manera de generar un sustento a las familias, pero poco duró el sueño.
Y es que comenzaron a registrarse casos de turistas, que después de visitarlo, presentaba una enfermedad provocada por el excremento de murciélago, pero no solo fue prohibida la entrada a los visitantes, sino que también se restringió el acceso a los pobladores.
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AA