Hortencia Sánchez
Los recuerdos pasan a formar parte de nuestra historia. Cuando se iniciaron los trabajos para remodelar la casa en la que ahora se encuentra el Centro Cultural Tapanco, muy cerca de los barrios de Santa Ana y Santiago, de alguna manera estuvimos cerca, viendo sus inicios; ensayábamos la obra Tribu Hair, producción de Addy Teyer.
Siempre comenté que les quedaría bien el lugar. Pues de eso ya han pasado siete años, en los que han intentado sostenerse, programando funciones de teatro, algunas exposiciones, cine, charlas, talleres, etc.; realizando festivales para todo público, sumándose a la cartelera de la ciudad.
El sostener un espacio alternativo no es fácil, habrá que ocupar bastante tiempo para hacerlo, conseguir recursos de varias partes, atender a las compañías, a los talleristas, al público en general.
¿Por qué hacerlo? Tal vez por la idea romántica de que el arte es una muy buena herramienta para construir mejor sociedad.
O porque es la única manera de tener presencia artística con obra propia y de otros compañeros, en estos tiempos en que acceder a los teatros de gran formato resulta imposible.
O a lo mejor porque es la mejor forma que se ha encontrado para transitar por la vida dejando semilla, camino abierto para los que vienen atrás, o simplemente por amar las artes por ser parte poderosa de la propia existencia.
Por lo tanto, los Tapanco continúan en la lucha. Sé que ahora están realizando algunas actividades para obtener recursos y poder contar con mejores aires acondicionados para que el público que asiste a sus funciones este más cómodo.
En un tiempo los acompañamos formando parte de la Red Alterna de Espacios Independientes, la cual procura realizar un trabajo de difusión a la par de generar recursos para continuar de manera ininterrumpida en la actividad artística. Ya no nos fue posible seguirlos acompañando, por estar trabajando por las mañanas para subsistir y en las noches en el Foro Alternativo Rubén Chacón, pero fue una muy buena experiencia estar en los inicios de esta importante Red.
Retomando lo complicado que a veces resulta administrar un espacio independiente, habría que considerar lo importante que resulta la función de los administradores de los espacios independientes, ya que el trabajo es bastante, entre administrar cartelera, armar proyectos para obtener recursos para sostener dicho espacio, realizar labor de difusión, checar con los grupos que respeten el orden y normas del lugar, hasta, muchas veces, realizar labores de limpieza, todo esto teniendo como principal fin el que el teatro se consuma y se difunda.
Por todo esto es necesario reconocer la labor de los compañeros Bryant, Alejo y todo el equipo que decidió unirse con ellos en la lucha para contribuir a la formación de públicos.
Felicidades por estos primeros siete años y que vengan muchísimos más. Larga vida al Tapanco.
Comparto la invitación que hacen para continuar trabajando por el teatro:
¡Venta de garaje!
Si tienes una producción próxima a estrenar, te invitamos a nuestra venta de garaje.
Aquí te esperamos con artículos fuera de lo común listos para una segunda o quien sabe qué número de vida. Además tendremos venta de alimentos y bebidas. Este evento es recaudación para enfriar a Tapanco en tiempos de calor. Domingo 31 de marzo, de 11:00 a 17:00 horas en el Tapanco, calle 47 No. 528 x 68.