En un hecho inédito, dos exfuncionarios de la actual administración del Ayuntamiento de Mérida, serán sometidos a proceso Judicial por el delito de concusión, es decir, por el cobro de cuotas a vendedores ambulantes.
Los inculpados tenían rango de jefes en la Subdirección de Mercados de Mérida encargados, precisamente, de regular los problemas de ambulantaje en la Ciudad.
Desde hace años la Subdirección era blanco de acusaciones de cobro de “piso” por parte de ambulantes, sin embargo, nunca había llegado ante un Juez.
De acuerdo con los datos asentados en la carpeta de investigación 148/2020, entre noviembre de 2018 y diciembre de 2019, que abarca la presente administración, los inculpados, valiéndose de su puesto que tenían en el Departamento de Inspección de la Subdirección de Mercados del Ayuntamiento de Mérida, ordenaron a inspectores que eran sus subordinados para que ubicaran a vendedores ambulantes en la periferia de la ciudad.
Esto quiere decir que la encomienda era retirar a los comerciantes irregulares del primer cuadro de la Ciudad; sin embargo, a cambio del pago de una cuota de 500 pesos al mes dejaban trabajar a unos 150 vendedores.
A las personas que no cumplían con el pago se les decomisaba la mercancía.
Las pesquisas iniciaron en octubre del 2019 luego de los grupos de ambulantes realizaron manifestaciones en el Palacio Municipal, donde denunciaron estos hechos.
Tras una investigación interna se comprobó la probable comisión del delito por lo cual se les destituyó del cargo y luego se interpuso la denuncia correspondiente por concusión.
La Fiscalía inició la investigación que terminó con la orden de presentación para la audiencia de imputación.
Hoy se realizará la nueva audiencia de vinculación contra los exfuncionarios municipales para que respondan por las acusaciones. La diligencia se realizará en el Centro de Justicia Oral de Mérida y será presidida por la juez Blanca Bonilla González.
De acuerdo al Código Penal de Yucatán, este delito está catalogado como no grave por lo cual el proceso lo llevarían en libertad, con algunas restricciones de las autoridades judiciales.
Por David Chan Caamal